Tales son sus concentraciones de cloruro de calcio, magnesio, sodio y potasio, con un porcentaje elevado de bromuro disuelto, que el Mar Muerto ha tenido gran importancia desde la Antigüedad. En el año 34 a.C. fué la propia Cleopatra, reina de Egipto, la que pidió a Marco Antonio conquistar esta zona para poder explotar sus minerales naturales, fuente de vida y belleza.
Su nivel está preocupantemente bajo, cada año más (a razón de 40 cm año) pero sigue conservando sus efectos curativos, así como, gracias a su salinidad, sus efectos de flotación que tan curiosos nos parecen.
Ya hablamos largo y tendido del Mar Muerto el DIA 4: Tras los pasos de Moises del diario de Jordania 2006, aunque no comentamos digno de destacar que la situación privilegiada de esta Maravilla de la Naturaleza a 420 m por debajo del nivel del mar, hace que sus playas sean ricas en oxígeno (un 10% más) y esto genera una proteccion solar importante.
Un baño de barro negro, de capacidades terapéuticas increibles (gracias a sus algas, sal y el calor del sol), es perfecto como complemento de un día de relax total que nos despide de este apasionante viaje por la historia..
YA HABÍAMOS ESTADO EN EL MAR MUERTO EN JORDANIA EN 2006, Y TAMBIEN EN LA PARTE DE ISRAEL EN 2013:
En 2006, durante nuestro viaje por Jordania ya habíamos estado en en el Mar Muerto en "Qué ver cerca de Ammán", día que aprovechamos tambien para conocer el área de Betania. Volveríamos en 2013 ya en el viaje a Israel y Palestina a la zona de Ein Gedi viniendo de la ciudad palestina de "Jericó, la ciudad más antigua del mundo"
Parece que el viento ha parado. Una sorpresa que jamás imaginarían "algunos" nos espera. Nos hemos levantado a las 5'30 supuestamente para ver el amanecer, pero lo que vamos a hacer es sobrevolar en globo el Wadi Rum, una experiencia inolvidable.
Son casi las 6 y el sol empieza a asomar en el horizonte del desierto, entre las montañas. Derrepente llega un coche remolcando una cesta. En otro coche aparte llega el piloto del globo.
El viento se está levantando y mucho me temo que no se van a dar las condiciones para poder elevar el globo. !!!Que rabia!!!. Bueno, es decisión del piloto. Nos invitan a desayunar. Vamos a esperar disfrutando de un bonito amanecer.
A lo lejos pasa el primer tren de la mañana dejando una preciosa imagen. Es precisamente esta linea la que mil y una veces atacaron los árabes al mando de Lawrence de Arabia. Hoy es un trayecto muy seguro.
El piloto vuelve a lanzar un pequeño globo al aire y observa que se pierde muy rápido en la distancia. Finalmente decide que aunque se podría volar, no quiere que resulta una mala experiencia para nosotros. !!!Buaaaaaaaa!! Nos hubieramos subido a un globo de helio si nos dejan. Snif SnifHaitham, nuestro chofer jordano, nos pregunta que queremos hacer. Todos decidimos tajantemente irnos al Mar Muerto cuanto antes. Es una despedida muy triste de un precioso desierto.Es quizás este momento de viaje, con todos en silencio, callados, con la tristeza de no haber podido realizar una de las experiencias que nos hubieran marcado más un viaje perfecto, cuando te das cuenta de lo afortunados que somos. En 15 días de viaje, en un grupo de 4 personas, antes o después surgen discrepancias, malos entendidos o simplemente alguna rencilla. La compenetración del grupo en el viaje ha sido perfecta y siempre tirando unos de otros cuando alguno se ponía mal del estomago, o se encontraba en algún momento de bajón. Es algo que no paga nadie ni nada. Incluso en estos momentos, intentando sacar una fotillo a la curiosa señal de camellos del desierto o parando a intentar comprar unas patatillas (1,5 JOD), el grupo entero nota que es nuestro último día y esto se acaba.
Las 3 horas y media que nos separan del Mar Muerto se hacen bastante largas, pero como hemos salido tan pronto tenemos prácticamente todo el día para disfrutar del gran capricho del viaje, el lujoso Movenpick Dead Sea (ver ARTICULO DEL ALOJAMIENTO AQUÍ). Estamos en el punto más bajo del planeta, a 420 m por debajo del nivel del mar.Un habitación con vistas al mar, un poblado tipo árabe, playa privada, piscina, más de 4 restaurantes y multitud de bares y el mejor SPA de todo Oriente, nos espera.
Tras hacer el check-in (aunque la habitación nos la dan a las 3pm) nos dirigimos directamente a la playa. Si por algo se caracteriza esta ubicación privilegiada del planeta es por sus lodos curativos de las orillas, que te dejan la piel como la seda. Multitud de famosos productos salen de aquí. ¿Quereis ver la tribu Himba del Dead Sea? jajjaja
A pesar del viento que nos hemos encontrado a primera hora de la mañana en el Wadi Rum, y algunas nubes del camino, aquí parece que existiese un microclima muy particular. Al encontrarnos por debajo del nivel del mar hay mayor concentración de oxígeno, lo que ayuda también contra el sol, que no nos abandonará en todo el día.
Baño! Barro! Solete! Esto si que es vida.... y es el final que todo viaje debería tener, jejeje
De los cuatro restaurantes del hotel, no tenemos la más mínima duda, vamos a comer al Luigi´s Restaurant, unas fresquitas cervecitas, unos riquisimos spaguetti carbonara y unas pizzas (69,70 JOD). Además nos damos cuenta que el hotel, aunque está ambientado, no está abarrotado de turistas como pudiera ser. También es cierto que ya ha pasado la Semana Santa.
Tras comer nos dan la habitación, como esperabamos, cuidada hasta el último detalle. Una idea inicial era pasar la tarde en el SPA pero tras observar los precios de éste (será famoso, pero por los precios!! jur jur) y ver la de opciones que nos daba el hotel, decidimos volver a disfrutar de lo realmente importante de la ubicación que es la zona de playa.
Curiosamente, el Mar Muerto no es el mar más salado del planeta. Con 33,3% de salinidad, está por detrás de otros como el Assal o el Don Juan aunque ninguno de ellos en tan especiales circustancias. Pasamos la tarde intentando zambullirnos en un mar que se empaña en mantenernos a flote.
El sol también parece que sabe que es nuestro último día, y nos regala un precioso atardecer, de los más bonitos de todo el viaje, en el horizonte israelí.
El resto del día lo aprovechamos para colgar alguna fotillo en internet (10,80 JOD) para tener tranquilas a las familias, cenar (la tenemos incluida pero no la bebida, 2,50 JOD) en el Restaurante Principal y bajar a disfrutar un espectáculo oriental a lado de la piscina fumando en seesha y bebiendo los últimos cubatillas y mojitos (18 JOD).
El viaje se acaba y el día también. Marsalam javivis!!!
Isaac y cia, desde el Mar Muerto (Jordania)
GASTOS DIA 15: 103,50 JOD (aprox 110 €)
COMPRAS: 0 JOD