(Viene del DIA 4 (I): Tullerías, el barrio del Louvre (y jardines y palacios de la realeza)) De forma inevitable, cuando repites un destino, acabas apreciando sitios y emplazamientos que, aún estando allí, habían pasado desapercibidos en otras ocasiones. A veces incluso esos mismos lugares despiertan sensaciones distintas. Esto me ha pasado hoy con Montmartre, para mi la "joya de la corona de París", un pueblo de burdeles y mala fama que fue capaz de transformarse cuando atrajo a importantes artistas creando un barrio bohemio con una atmósfera única, coronado en su cima por la imponente Basílica del Sagrado Corazón o Sacré Cœur, referente de los principales atractivos que ver en Montmartre antes que el Moulin Rouge o la "llegada" de Amelie.
Como ya os comenté en el artículo anterior, la mañana comenzaba con una de las mejores jornadas en París que ponía su guinda en este recorrido entre pintores, un rico picoteo en el famoso Deux Moulins y un espectáculo nocturno en el Moulin Rouge. ¿A qué se os ponen "los dientes largos"?
- Qué ver en Montmartre ... o como perderse por el París más bohemio
- Montmartre, fuente de mitos para la ciudad de París
- Recorrido a pié por el barrio de los pintores, el más bonito y famoso de París
Qué ver en Montmartre ... o como perderse por el París más bohemio
"Hoy teníamos una sorpresa al final del día, disfrutar del espectáculo del Moulin Rouge que no habíamos hecho en anteriores viajes, así que la tarde la pasaríamos en uno de los barrios con más encanto de París, Montmartre, barrio de pintores y artistas. De todas formas, veinticinco años han pasado desde mi último paso por este área, muchos para recordar como estaban antes las cosas pero sí soy consciente que los pintores en esa época abarrotaban las escaleras del Sacré Cœur. De hecho, "Loreta" (como llamábamos a mi prima en esa época), se había hecho un retrato aquí que resultaba una estampa preciosa. Ahora en cambio los pintores se han trasladado a la Place du Tertre casi apiñados ya que los restaurantes han ocupado con sus terrazas toda la superficie.
No obstante, a pesar de todo, Montmartre sigue respirando ese aire extravagante de antaño. Me hubiera gustado hacerme un retrato con Isaac aquí pero contábamos con poco margen y tanto tiempo sentada probablemente no hubiera sido buena idea para Oli jejejej. Sacré Cœur, aunque sin los pintores no parece lo mismo, continua siendo una verdadera joya tanto en la distancia como en su interior y como tampoco me acordaba demasiado, me sorprendió de nuevo. El escenario de la película francesa Amelie (un escaparate con algunas de las cosas de la película en la entrada de los aseos te hace saber donde estás) y el Moulin Rouge sumaban el resto de una tarde maravillosa.
¿Queréis saber el recorrido que hicimos por los principales atractivos que ver en Montmartre en una ruta detallada con mapa (tenéis todos para diseñar el vuestro en “Mapa de París con planos en detalle para tu viaje“)? Algo parecido a lo siguiente...
Lo destacado en Montmartre, conocido prácticamente por todos vosotros, es la Basílica del Sagrado Corazón o Sacré Cœur pero hay muchas más cosas que nos ofrece este imprescindible barrio
RECOMENDACIÓN:
Ya no solo lo decimos nosotros en prácticamente todos nuestros artículos, sino que en cualquier lado puedes leer que hay que MADRUGAR para poder ver el Sacré Cœur sin agobios ya que es uno de los sitios de París (de tantos en esta ciudad) que visita muchísima gente.
La Plaza du Tertre o plaza de los pintores, originalmente la plaza mayor del pueblo de Montmartre, el Dalí Espace Montmartre, dedicado al artista al que da nombre, el Musée de l'Erotisme, expone arte erótico moderno y antiguo de los cuatro continentes...
... el Museo de Montmartre, ocupa el edificio más antiguo del barrio, una mansión del s. XVII donde vivieron pintores como Renoir, el Moulin de la Galette, lo podemos ver coronando la cima más alta de París, el Parc de la Vilette, el mayor parque cultural de la ciudad, la Église St-Pierre de Montmartre, construída donde anteriormente hubo un templo romano, el Musée Jacquemart- André, para poder hacerte una idea de la vida y los gustos de la alta sociedad parisina... ¿Seguimos? la Maison Rose, el cabaret Lapin Agile, la escultura Passe-Muraille en la Plaza Marcel Aymé, la Plaza Émile -Goudeau, la iglesia Saint Jean de Montmartre o el Muro del Amor...
Montmartre, fuente de mitos para la ciudad de París
Montmartre fue un lugar rural lleno de molinos que proporcionaban harina a París, una aldea en la colina que fue capaz, inmortalizada por importantes artistas a finales del s. XIX y principios del S.XX, de transformar el centro de la vida bohemia de la ciudad. Hoy en día vive de los turistas que llegan a visitar su Sacré Cœur o deambular por sus seductoras y empinadas calles, acompañados en todo momento por las vistas que nos ofrece de París o por la atmósfera única que se respira hasta para tomar un café.
A sus pies.. ¡el distrito rojo! una conglomerado de tiendas eróticas, locales de striptease, llamativos cabarés y clubes de moda, donde además se pueden todavía descubrir rincones peculiares sin turistas.
COMO LLEGAR AL BARRIO DE MONTMARTRE EN PARÍS:
Para llegar hasta Montmartre desde cualquier punto de la ciudad, la mejor opción es el metro. La linea que te lleva hasta Abbesses, la estación de metro de Montmartre, famosa por la marquesina de cristal de su entrada, es la LÍNEA 12 que te hará subir nada menos que unos 90 escalones para llegar a su salida o esperar a poder ir en ascensor. Desde allí puedes seguir subiendo la escalinata del Sacré Cœur o coger el funicular. En definitiva, nosotros que no nos podemos cansar mucho, a Isaac lo meto en el "saco" también, optamos por coger un UBER (11.50 EUR) que nos dejaba a las puertas del funicular y llegar de esta manera a la Basílica del Sagrado Corazón. ¿Por qué abajo? Porque hemos aprovechado para comer tranquilamente en un bar de la zona baja.
Bueno creo que como introducción ya es suficiente, ¿comenzamos la ruta? Al Sacré Cœur..
Recorrido a pié por el barrio de los pintores, el más bonito y famoso de París
Como os comentamos, Sacré Cœur es el lugar ideal para iniciar nuestro recorrido por Montmartre, siendo la bella iglesia la primera visita pero antes no ha pasado desapercibido el precioso muro de los "te quieros", Le mur des Je t'aime. Una obra que pasó a ser uno de los lugares imprescindibles que visitar en París (si estás enamorado con mayor razón jeje), un mural dedicado al amor que podemos encontrar en la propia Place des Abbesses y que está compuesto por 612 azulejos de lava esmaltada sobre los cuales hay 311 "te quiero" en 250 idiomas. Parece ser que el color rojo sobre los azulejos simbolizan los trozos de un corazón roto que el muro trata de unir.
¿Y del Sacré Cœur 1 qué podemos deciros que no sepáis ya de uno de los lugares que ver en París imprescindibles? Situada en el "butte" (el montículo), el punto más alto de la ciudad, supone mucho más que una simple basílica, una auténtica experiencia en si misma con el añadido de su preciosa escalinata donde poder disfrutar de un ambiente especial y las vistas que te brinda que bien puedes confundir con una verdadera postal. Nosotros no pudimos evitar estar un buen rato allí, sentados, contemplando la impresionante panorámica que teníamos enfrente y entretenidos con la algarabía que se forma en torno a este original santuario.
Su construcción se produjo en medio de la sangre que por un lado dejaba la derrota de Francia ante Prusia y por otro el levantamiento de los obreros contra el gobierno reaccionario, cuya batalla por el control fue básicamente una guerra civil que terminó con ejecuciones en masa, exilios y gran destrucción. Sacré Cœur fue un medio para expiar los pecados de la ciudad en un gesto de paz y perdón. Aunque su consagración no se haría efectiva hasta 1919 y seguiría contrastando con el estilo de vida bohemio de la zona.
Nunca se libró de las críticas por su imagen y diseño (un poeta la definió como un biberón gigante para los ángeles) pero en su interior luce uno de los mosaicos más grandes del mundo del Cristo en Majestad. En cuanto a su cúpula, si subes los 234 escalones que tiene, te ofrece una de las vistas más espectaculares de París.
Nosotros en esta ocasión no hemos subido (Oli creo que no está para estos trotes -bueno, quizás ella si pero yo no, jaja-) ni tampoco hemos entrado al interior de la Basílica al ver la cantidad de gente que quería hacerlo. Dentro guarda sus brillantes mosaicos y la cripta con sus capillas iluminadas con velas, otra excusa más para volver pues hace tiempo que no entramos. Otro dato interesante es su campana, la Savoyarde, que con 19 toneladas de peso y situada en la torre que hay encima, es la más grande de Francia.
PARADAS OBLIGATORIAS DONDE SACARSE UNA FOTO:
- Entrada metro de Abbesses y Le mur des Je t'aime.
- Patio de los Judios, en la rue Durantin, donde se han rodado muchas películas.
- Escalinata Sacré Cœur, una experiencia en sí misma.
Una vez recreados en todo lo que gira alrededor del Sacré Cœur (el que quiera más tema religioso tiene en la Iglesia de Saint-Pierre de Montmartre 2 su siguiente parada), nos dirigimos a la Plaza du Tertre 4 que ahora está reconvertida en la plaza de los pintores (originalmente era la plaza mayor del pueblo antes de que se integrara en la ciudad). Esta plaza, corazón y centro neurálgico del ambiente de Montmartre, acoge a un sin fin de artistas que retratan en múltiples formas y colores la ciudad de París o cualquiera de sus monumentos imprescindibles. Es una delicia pasear en medio de ellos (también aquí está el Museo de Montmartre 3 )
Para mi, desde luego, es una de las zonas con más encanto de Montmartre y, si me apuras, de todo París. Pero no solo se puede disfrutar de las pinturas de la ciudad sino también de los retratos que en muy poco tiempo te puedes llevar como recuerdo. Aquí pintores y retratistas exponen sus obras al aire libre desde hace mucho tiempo y consiguen trasnportarte al París bohemio del siglo XIX, cuna del impresionismo.
Pero no solo la Place du Tertre es famosa por esto sino que, por su ubicación en una colina, se sucedieron en ella numerosos acontecimientos que le dieron notoriedad. En ella vivieron muchos jóvenes artistas que venían a París con el sueño de exponer y vender sus obras como Picasso o hasta esta plaza subiría el primer coche de Louis Renault, iniciándose así la industria automovilística francesa. Rodeada de cafeterías y creperías donde tomarte algo mientras escuchas a los músicos callejeros que también ocupan un lugar en este espacio con tanto encanto.
A pocos pasos de la plaza encontramos otro lugar icónico de Montmartre, el Dalí Espace Montmartre 5 , un museo de estilo surrealista donde se exhiben más de 300 obras del extravagante artista Salvador Dalí. La colección incluye muchas reproducciones de sus esculturas, litografías, ilustraciones y algunos muebles como su famoso sofá de los labios, Mae West Lips.
El recorrido que nos hemos marcado por sus pintorescas calles es una chulada, nos vamos parando cada poco para que no se nos escape nada, mientras hacemos "boca" para Les Deux Moulins.
Poco a poco llegamos a otro punto interesante que ver, no sin parar en todas las tiendas habidas y por haber (7.50 EUR)
La Maison Rose es famosa por haber sido protagonista de una de las pinturas de Maurice Utrillo, uno de los pintores de la denominada Escuela de París de principios del siglo XX dentro del realismo tradicional, de ahí que esta casa por su color y su forma junto con su vegetación quedase retratada dentro de la obra de un artista y al mismo tiempo pasase a ser un punto de interés dentro de Montmartre. En la actualidad es un restaurante donde degustar platos franceses y admirar esta original Maison Rose.
MUSEOS EN MONTMARTRE:
- Dali Espace Montmartre: Museo de estilo surrealista donde ver obras de Dalí
- Musée de Montmartre: Una mansión del s.XVII donde vivieron pintores como Renoir
- La Halle Sain-Pierre: Alberga un museo y una galería donde se presentan grandes exposiciones temporales.
Pero no solo de "monumentos" vive Montmartre también podemos visitar o admirar desde fuera, como hicimos nosotros, sus viñas...
La viña de Montmartre es la más antigua de la ciudad, compuesta por variedades más clásicas y su nacimiento data de 1930 con el fin de frenar la expansión inmobiliaria de la zona. Hoy en día sigue siendo el orgullo del "pueblo" celebrando su fiesta, la vendimia, todos los años.
Seguimos recorriendo Montmartre, paseando por sus calles y admirando muchas de sus " joyas" como Studio 28 7 o el Ciné 13 Théâtre, un teatro con muchas historia y sobre todo con muchísimo encanto. Aquí podemos ver tanto teatro como cine y danza o incluso espectáculos excepcionales como algún Festival, proyecciones de cortometrajes, conciertos acústicos o multitud de eventos culturales.
A su lado el Moulin de la Galette 6 cuyo objetivo principal era la elaboración de harina aunque pronto pasaría a tener otras funciones como una especie de bar al aire libre: guinguette. Su momento de gloria vendría de la mano de Renoir cuando lo pintó en su "Baile del Moulin de la Galette" inspirando también a otros artitas de la talla de Picasso. En la actualidad es junto al Moulin Radet el único molino rescatado de todos los que existían en Montmartre, no se puede visitar su interior pero sí verlo desde la rue Lapic.
Y finalmente, nos dejamos atrapar por las calles de Montmartre y su atmósfera, llenas de gente que conviven con numerosos bares y restaurantes, supongo que es lo que ayuda a que siempre haya ese ambiente tan especial.
Y con tanto recorrido ya hace un buen rato que se nos había abierto el apetito.
RESTAURANTES EN PARÍS: Les Deux Moulins
Es uno de los cafés más famosos de París entre otras cosas porque ha sido el escenario de la película francesa Amélie…
.. y claro, a Oli no podíamos hacerla esperar para "cenar en un sitio de película" en su primer paso por la capital de Francia, aunque estuvimos valorando reservar en el Moulin Rouge con cena (tienes toda la info ya en "Espectáculo Moulin Rouge de París: entradas, cena y opinión")
Aquí trabajaba la "original" protagonista mientras se iba trazando su destino. Si no has visto la película te la recomiendo ya que es diferente, muy francesa. ¡¡¡A mi me encanta!!!. Comedia romántica que marcó una época donde el país francés pasó a tener un hueco en la imaginación de la gente y muchas fans se vieron identificadas en esa "alocada" y solitaria Amélie Poulain en el que su gran deseo era ver felices a los demás.
Aunque Les Deux Moulins no es simplemente un bar donde tomar algo, también puedes cenar de manera espectacular mientras disfrutas de música en directo (38.70 EUR)
Un sitio muy acogedor y agradable, lo recomendamos cien por cien.
Ya con la "panza" llena nos componemos de nuevo para disfrutar de una experiencia que estábamos esperando desde hace mucho tiempo y no acababa de disfrutar por unas cosas u otras. Hablamos de ese famoso espectáculo en el Moulin Rouge. Poca gente quedará que no haya oído hablar del Moulin Rouge. Para nosotros era algo que teníamos muy claro antes de venir y que os contábamos en los preparativos, esta vez no nos iríamos de París sin ver el Moulin Rouge por dentro y sin disfrutar de su espectáculo.
Inmortalizado en los carteles de Toulouse-Lautrec y en el cine, el Moulin Rouge que conocemos nace de la réplica de 1925 de su molino de viento rojo original y actualmente podemos disfrutar en él de un auténtico cabaret con fantásticos escenarios, vestuario, coreografía, y una agradable velada si quieres cenar allí.
Nuestra experiencia completa, toda su historia, el espectáculo, los tickets disponibles y la opinión la tenéis ya disponible en "Espectáculo Moulin Rouge de París: entradas, cena y opinión" ya que merecía un artículo dedicado.
Nuestro paseo por Montmartre dio de si hasta la salida del show y pedir un UBER (10.70 EUR) de regreso al Hotel Andréa (no te pierdas la MEGAGUÍA de Dónde alojarse en París: MEJORES ZONAS y hoteles), pero no queremos que os perdáis nada así que además de nuestro recorrido y los mapas detallados, os hemos enumerado lo que a nosotros no nos ha dado tiempo a ver o disfrutar y así también lo tenemos recopilado para futuros viajes
QUÉ VER EN MONTMARTRE QUE SE NOS QUEDO EN EL TINTERO EN ESTE VIAJE:
- Au Lapin Agile: célebre y rústico cabaret frecuentado por intelectuales de principios del s.XX.
- Cimetière de Montmartre: Necrópolis famosa de París después de Père Lachaise y Montparnasse.
- Rue du Chevalier de la Barre, una pequeña calle repleta de tiendas de souvenirs.
- Iglesia Saint Jean de Montmartre, sin ser muy importante, llama la atención por su diseño.
¿Con esto ya habéis hecho las maletas dispuestos a disfrutar de lo mejor que ver en Montmartre en particular y París en general? Como siempre si algo echáis de menos nos lo contáis y así ampliamos la información para futuros viajeros. ¡Mañana nueva jornada!
Isaac y Paula (y Oli en la barriga) desde París
GASTOS DEL DÍA: 123.80 EUR [y REGALOS: 44.35 EUR]