Vuelo a Chad, el comienzo de una expedición del S.XXI

Ésta es una de esas historias que me gusta que queden en este álbum de vida que es Chavetas, un viaje que habla de uno de los destinos más remotos del mundo pero en cuyo interior profundiza sobre las relaciones personales. Es muy posible que si vives sumido en ese mundo de estrés, crispación y trabajo intenso que nos ha tocado vivir, no sea fácil de entender este "cuento" pero a veces, la vida, los viajes, regalan experiencias puramente maravillosas capaces de generar verdaderos puntos de inflexión. Esta historia comienza con un vuelo a Chad, el comienzo de una expedición de tiempos pasados en pleno S.XXI

Si quieres vivir una aventura diferente te invito a leer esta bitácora pues quizás, y solo quizás, esta historia sirva para plantearte algunas reflexiones...

Chad, una expedición de tiempos pasados en pleno S.XXI

"Desierto puro, el Parque Nacional de vida salvaje más legendario que hayas visto en el mundo, el África negra más auténtica... pero, sobre todo, un concepto de expedición de tiempos pasados en pleno S.XXI de llegar donde el camino lo permita, dormir acampando donde el destino nos lleve, no saber de antemano que pasará mañana y disfrutar de atardeceres y amaneceres como nunca has sentido y vivido". Mis piernas comenzaban a temblar según lo escuchaba. Alonso transmite su energía, pasión y, visto con lejanía, sueños imposibles.

Recuerdo todavía cuando conocí a Alonso y Mónica en un Fitur de 2015. "Queremos hacer viajes alternativos en camión por África a destinos no usuales: Sierra Leona, Liberia, Senegal, .." Viajes en camión, vale, pero menudos destinos top pensaba yo a la vez que veía con escepticismo la idea. Un año después allí estaban, lejos de embaucadores que se les llena la boca hablando de "perseguir sueños" y claro ejemplo que hay personas que no aceptan la palabra imposible en su vocabulario. Y yo, desde mi casa, literalmente alucinado con lo que sus redes mostraban.

Junio de 2019. Es el momento. "Chad... vente con nosotros en Febrero y tráete el dron" ¿Chad? "¿Qué se te ha perdido en el Chad hijo mio?" Hasta Olivia, que apenas empieza a intuir el concepto de países del mundo, me miraba extrañado mientras intentaba pronunciar su nombre.

La idea tomaba forma entre cerveza y cerveza con un viejo amigo del colegio, otro apasionado en su campo, el de los drones FPV. "¿Qué me dices Chema? ¿Te atreves?" ¡2 días! En solo 2 días todo lo que era una mera hipótesis se había transformado en una expedición, la Expedición Kumakonda a la meseta de Ennedi y el PN Zakouma en el Chad y los meses habían volado. "Mira Paula, ya está Alonso con Óscar, el mecánico de confianza que ha ido con él desde Madrid, preparando el camión en Yamena"

El visado más complicado que he gestionado en mi vida, permisos que no llegaban, pasaporte perdido por Bruselas, inversiones de otro sueño que vendrá y el apoyo incondicional de Paula, sin la que no estaría escribiendo estas lineas.

Maleta para un viaje a Chad, ¿por dónde empezar?

A nadie quiero engañar, una expedición de este tipo (sin ser prospección que tiene todavía más incertidumbre) no es para todo el mundo. Largas jornadas sin las comodidades habituales, acampando en "donde Cristo perdió la zapatilla", sin ducha (ni fría ni caliente) y donde la labor colaborativa entre el grupo es fundamental, ¿qué tipo de equipaje puede requerir cuando encima la mitad de la mochila va ocupada con cámaras y drones?

A esto se le añadía la problemática de viajar con la Royal Maroc, una aerolínea a evitar siempre que uno pueda (como en Benín, volvieron a cambiarnos los vuelos de fecha a 15 días de viajar), cuya escala en Marruecos -un país que tiene prohibidísima la entrada de drones- hace que éstos tengan que ir en la maleta facturada. Unos pantalones, camisetas, mudas, un buen botiquín y neceser y algo de abrigo, completaban los espacios. ¿Algunas ideas? Otros viajes me han enseñado que un par de rollos de papel higiénico nunca están de más y unas esponjas tipo hospital que se venden en farmacias, de esas que mojas y ya vienen enjabonadas, pueden ser una buena solución de aseo básico.

Y aquí estamos, con todo listo. Como dice Chema... "ya no hay vuelta atrás"

Vuelo a Yamena vía Casablanca, el inicio de la aventura

He pasado la mañana con Oli en su fuente favorita pero la he dejado llorando. Nico, Paula y ella me han despedido esta mañana en el portal mientras cogía el taxi al aeropuerto (14 EUR). Nico no lo entiende, no deja de ser un peludo muy inteligente pero un perro al fin y al cabo, pero ella ya sabe que su papá se va unos días. "Te voy a echar de menos papá". ¿Cómo una niña de 2 añitos y 2 meses puede expresarse así? Paula.. ¡has hecho un gran trabajo!

Chema ha llegado muy agobiado (bueno, realmente creo que estaba yo más que él) a Alvedro, el pequeño aeropuerto que tenemos en A Coruña. Imposible meter muchas de las baterías, el saco, sus propias zapatillas deportivas. Llevamos muchos "trastos", de todo menos ropa. Finalmente un par de vueltas y una forzada "plastificación" y todo parece listo. El problema es que tenemos una escala en Madrid con diferentes localizadores y hay que cogerlas y volver a embarcar con la Royal Maroc que tras su "cambio" nos ha hecho que todo se apriete mucho. No obstante, hemos logrado hacer la escala sin problemas y comer algo (12 EUR) antes del vuelo de Casablanca donde aterrizamos puntualmente a las 18.30, ya con el atardecer.

El grupo de Whatsapp que se abrió hace unos días se ha movido bastante hoy y ya hay 3 compañeros por Casablanca llegados desde diferentes ciudades a los que veremos ahora. El tramite de pasaporte y controles de esta ciudad marroquí nos preocupaba y, de hecho, han detectado la emisora y gafas de dron de Chema (los drones van facturados, mi Perejildo -mavic pro- incluido para evitar líos) aunque debaten entre ellos hasta que sueltan un "YAMENA, ok". En Marruecos está prohibidísimo pero parece que si vas de tránsito no tienen mayor inconveniente. ¡Conseguido!

¡Y aquí están! ¿Primeras impresiones? Enrique es un hombre viajado, muy hablador y afable, creo que será uno de los grandes protagonistas de este "Gran Hermano". Kris es una chica joven que ha viajado 8 meses por África lo que me hace pensar que viene de vuelta y media. Carlos se lanzó a la piscina en Junio y es más reservado, quizás expectante, a lo que pueda venir. Tim y Kerri son australianos y vienen desde París y constituyen el reto más grande que tendré por la barrera del idioma. Ah, y no podía olvidarme de mi querido Chema, que aunque ha estado por medio mundo (Nueva Zelanda, Islandia, ..) el primer país de África que pisa en su vida será Chad (eso es una entrada a lo grande). Todos ellos, junto a un servidor, perseguimos esa expedición soñada que comienza en un vuelo rumbo a una capital que no sabía ni que existía, Niamey, capital de Níger, escala técnica que nos llevará a nuestro destino final, Yamena.

La energía de un viaje de ida no tiene limites. Son unos vuelos en los que no eres consciente de las 6 horas que sobrevuelas la mismísima nada, el Sahara, kilómetros y kilómetros de puro desierto donde se encuentra la vida más dura del planeta hasta que, casi sin darte cuenta, aterrizamos en torno a las 2.15 (tras la escala técnica previa) en un solitario N'Djamena International Airport que no tiene ni aviones y que se cierra habitualmente debido al polvo en suspensión permanente originado por el harmattan. Es una de las entradas más sórdidas que me ha deparado un destino, con una pequeña cola de pasaporte para validar el visado tras rellenar una pequeña ficha de entrada y poner dedos y mirada a la cámara, y tras pasar un control de temperatura y mostrar la cartilla de vacunación obligatoria donde comprueban el certificado de Fiebre Amarilla. Por lo demás, las maletas ya salían por la cinta, nadie nos ha registrado nada (ayudado por el guía local que Alonso nos ha enviado para evitar líos) y, tras un abrazo con el anfitrión, hemos hecho un pequeño trayecto en taxi de 15 minutos a nuestro remanso de paz, la misión Católica Centre d'accueil de Kabalaye. 3.30, todo correcto. ¿Comenzamos ahora si este viaje? Algo me dice que voy a tener mucho que contar...

Isaac (junto con la Expedición Kumakonda), desde Yamena (Chad)

GASTOS DEL DÍA: 26 EUR