La jornada de hoy también es un imprescindible en de la capital húngara, un recorrido por los baños termales, pista de hielo y Ruin Bars en Budapest, que no puede faltar en tu itinerario, atracciones que nosotros repetiríamos más de una vez y que fácilmente podrás combinarla con otros planes alternativos. Los balnearios de Gellert o Szechenyi, la pista de hielo del Parque Municipal o la visita a una zona muy valorada por muchos centrarán nuestro recorrido tras el recorrido por Pest y el recorrido por Buda de días atrás.
Seguimos nuestro viaje por la preciosa Budapest, recorriendo los lugares imprescindibles y disfrutando de los mejores planes que te brinda la ciudad. Hoy disfrutaremos algo más de las experiencias y un poco menos de las visitas que, por un lado, también forman parte del poder disfrutar de un lugar, y por otro, se agradece en cualquier destino.
- Ruta del día:
- Planificación y reservas con antelación
- Baños termales de Széchenyi, los mejores de Budapest
- Castillo de Vajdahunyad, Gundel y la pista de hielo más grande de Europa
- Museo Etnográfico y más miniestatuas "sorpresa"
- Ruin Bars de Budapest (y Karavan), la nueva moda
Ruta del día:
Planificación y reservas con antelación
🗺️ RUTA DEL DÍA
El itinerario del día ha sido el siguiente (clic para verlo en Google Maps):
📍 RESERVAS CON ANTELACIÓN
🏨 HOTEL
Estamos en un "Bueno/Bonito/Barato" en plena Váci Utca (más céntrico imposible), una de esas joyas que no siempre se encuentran. No obstante, como siempre te dejamos todas las opciones que valoramos y mejores barrios en ➡ Dónde alojarse en Budapest: MEJORES ZONAS y hoteles
Baños termales de Széchenyi, los mejores de Budapest
Nos despertamos temprano en nuestro Promenade City Hotel, con desayuno incluido, que con tanto acierto hemos elegido. Bien abrigados porque hace mucho frío (aunque menos de lo que se está acostumbrado por estos lares en esta época del año) pero con el bañador a cuestas ya que hoy lo vamos a necesitar. Primera parada del día: Baño termal de Széchenyi.
Budapest tiene una gran tradición de balnearios, de ahí que se la conozca también como "la ciudad de los balnearios" con más de 100 a lo largo y ancho de la ciudad. Aunque el balneario de Széchenyi es uno de los más visitados y valorados.
Para llegar hasta el Balneario de Széchenyi, hoy hemos optado por utilizar el servicio de los Bolt (💵 3.720 HUF), los Uber de Budapest: Te descargas la App y ya puedes ver el trayecto y, sobre todo, el precio. Nada tiene que ver esta decisión con la cantidad de transportes que existen aquí, siendo una de las cosas a destacar de la capital húngara, la variedad y la asiduidad de su red de transportes. Eso sí, asegúrate de que sea un taxi legal que lleve en su matrícula un distintivo de taxi en amarillo y que ponga bolt taxi. ¡Y aquí estamos!
Aunque ya tienes el artículo dedicado "Balneario Széchenyi de Budapest: entradas, precios y consejos" para tus preparativos, aquí van unas unas pinceladas de cómo fue nuestra "incursión" en uno de los balnearios más concurridos de Budapest. Al llegar y coger nuestros pases (OJO es mejor comprar la entrada por internet, si tienes claro el día o en última instancia comprarlas en las máquinas que hay en el vestíbulo, porque se forman bastantes colas) te indican que puedes pasar a una cabina individual o compartida para cambiarte (💵 25.600 HUF).
¡OJO CON LAS TOALLAS, GORRO Y CHANCLAS!
Aunque hay la opción de comprarlas allí si no tienes o, al igual que nosotros, no quieres ir cargando todo el día con ellas porque era el primer punto de nuestro recorrido del día que sepas que son a precio de CAVIAR. Hay dos tamaños mediano o pequeño. Nosotros pensábamos que había la opción de alquilarlas y después de su uso devolverlas pero NO, no existe esa opción de alquiler. Compramos una para compartir (Oli sí llevaba la suya) y la dejamos, ya que no volvíamos al hotel hasta la tarde-noche.
Si no traes, por tanto, allí también se compra todo lo que puedas necesitar para "ponerte a remojo" como toallas, chanclas, gorros de piscina e incluso bañadores (💵 14.800 HUF ¡GRAN ERROR!).
Coges tu pulserita, que te da acceso a tu taquilla y ya puedes acceder al interior sin tiempo límite, solo tendrás que adaptarte al horario del recinto. Piscinas exteriores están abiertas de 9h a 22h y las piscinas interiores de 9h a 19h. ¡¡¡Claro el límite lo va a poner el frío que hace fuera del agua!!! jejeje
En los vestuarios no hace ni pizca de frío, al contrario, y dentro de las piscinas "damos fe" que tampoco pero diferente es la temperatura de los pacos pasos que tienes que hacer hasta sumergirte en una de ellas. Nosotros, ese día, teníamos 4 grados en el exterior......Así que os podéis imaginar nuestra carrera de un metro hasta la piscina: ¡¡¡la más rápida de la historia!!!
Por fin... !!!al agua patos!!!! ¡Qué agusto se está!. El agua, que forma parte de este espectacular balneario, proviene de más de 1200 metros de profundidad a una temperatura de unos 75ºC, con lo que las piscinas tienen diferentes temperaturas: frías, templadas y hasta la más caliente con 40ºC. Nosotros ya no salimos de esta última, jejejej. La verdad es que cuando llegas con el frío puesto en la nariz y abrigada hasta las orejas, pues no te parece, a priori, que se vaya a estar tan bien y tan calentito ahí dentro. Perooo así es, hasta te puede apetecer nadar y todo.
Como os contamos antes Szécheny tiene 15 piscinas, 3 grandes en el exterior y 12 repartidas en el interior del complejo. A mayores diferentes saunas, baños turcos, así como salas de masajes y una variedad de tratamientos.
Lo disfrutamos muchísimo y, sinceramente, no nos apetecía nada salir de alli. Oli ya había ido algún spa en Galicia pero al aire libre nunca, era su primera vez y la experiencia no pudo ser mejor.
CURIOSIDAD
El juego del adjedrez, aquí es como una cultura, en cualquier parque o calle animada, te puedes encontrar a gente jugando, pues lo mismo, en las piscinas de este balneario puedes ver como se practica este juego, ¡sí si como lo oyes! (bueno como lo lees).
El balneario de Széchenyl es ideal para ir con niños pero tienes que tener en cuenta unas normas básicas porque no está indicado para todas las edades. No es obligatorio utilizar gorro de piscina (salvo para la piscina de natación), nosotros se lo pusimos a Oli por el frío, más que nada, para que le amparase un poco. Mejor ponerlo porque en la cabeza sí notarás esos 4º grados de los que te hablaba antes.
Ya no solo la piscina en la que estuvimos destaca en todo este complejo termal, los edificios de estilo neobarroco de principios del siglo XX son una verdadera maravilla. Mientras estás disfrutando de un agradable spa, estás contemplando una preciosa construcción.
Castillo de Vajdahunyad, Gundel y la pista de hielo más grande de Europa
Seguimos nuestro camino hasta el siguiente destino que no es otro que la pista de hielo más grande de Europa para ponernos un poco a tono patinando sobre hielo. Llegamos así al Parque de la Ciudad donde se encuentra esta pista (con hielo en esta época) y donde se sitúa también el Castillo de Vajdahunyad con su lago y con la nueva atracción de la que dispone este parque desde el año 2022.
Todo el entorno que rodea este Parque de la Ciudad es una auténtica chulada. Conocido también como Parque Városliget es el principal lugar de entretenimiento de la ciudad, con una gran extensión, puede presumir de ser uno de los primeros parques públicos abiertos en el mundo. Entre la variedad de atracciones que podrás encontrar en él está una nueva: el Balloon Fly, para poder admirar la ciudad desde las alturas. Nosotros nos tuvimos que quedar con las ganas ya que hacía bastante niebla y no se veía nada. Apuntado para otra ocasión...
En los alrededores nos encontramos también con un lugar emblemático: el restaurante Gundel, el restaurante de mayor prestigio de Budapest y que tenemos incluido en nuestro artículo "Comer en Budapest: restaurantes y platos típicos". En él podrás degustar platos típicos húngaros pero para "paladares gourmet". Un lugar con mucha historia detrás y en el que nosotros pretendíamos tomar un café (para tener la oportunidad de conocerlo por dentro) pero estaba cerrado, sí, hoy parece que no acertamos...
¡Hora de ir a patinar!. Inaugurada en 1870, la pista de patinaje del Parque de la ciudad de Budapest (Városligeti Műjégpálya) es una de las más antiguas de Europa y está entre las más grandes del mundo. Si quieres patinar en invierno, éste es tu lugar (💵 13.000 HUF).
El entorno de esta pista no puede tener más encanto ya que se encuentra "protegida" por el Castillo de Vajdahunyad, un lugar idílico y peculiar, su historia viene de la mano del Castillo de Hunyad en Transilvania, ya que es una réplica de éste y la novela de Drácula. Aún tratándose de un castillo nunca desempeñó las funciones propias de éste, ya que fue construído para una exposición que tuvo lugar en el año 1896. Como curiosidad contaros que en sus inicios estaba construido en madera y cartón (sí, cartón) pero fue tal la acogida que tuvieron que construirlo en ladrillo. En la actualidad es el Museo de Agricultura.
La experiencia no pudo ser mejor, era la primera vez que patinábamos juntas Oli y yo sobre hielo y también la primera vez para Oli. Lo pasamos genial, nos reimos muchísimo y, de paso, hicimos ejercicio intentando mantener el equilibrio. Si os gusta patinar os lo recomiendo totalmente. Isaac, después de su experiencia de "medio segundo" (literal) en Nueva York, no quiso ni intentarlo con la excusa perfecta de hacernos fotos jajajaj.
No os voy a engañar, la pista es taaaaaan grande que dar una vuelta con Oli, pingüino incluido (💵 800 HUF), pues...cansa bastante. Pero da gusto estar un ratito en este escenario tan chulo.
En este Parque de la Ciudad también podremos ver la famosa "Estatua del Anónimo", de la que "se dice se comenta" que representa a un notario de un antiguo rey húngaro. Por aquí seguimos un rato más hasta llegar a la Plaza de los Héroes, una de las plazas más famosas de la ciudad, donde las estatuas situadas en la parte central de ésta conmemoran a los líderes de las 7 tribus fundadoras de Hungría.
Museo Etnográfico y más miniestatuas "sorpresa"
En un agradable paseo, llegamos hasta la terraza del Museo Etnográfico. Este museo, dentro de una construcción de lo más original, lo podemos encontrar al lado de la Plaza de los Héroes. Es uno de los edificios más nuevos de Budapest, sin embargo lo que más llama la atención de este peculiar edificio es su terraza, en forma de U (a mi me recuerda a una pista de skate) con jardines y miradores.
El Museo Etnográfico, además, es uno de los edificios más modernos de Europa, y no hace falta jurarlo ya que nada más verlo causa impresión. Su significado: dos alas arqueadas con una función diferenciada. Anteriormente estaba situado al lado del Parlamento, abriendo sus puertas en el año 1872. Este museo se recopila y conserva el patrimonio cultural intangible y los materiales asociados con la investigación etnográfica.
Y es aquí donde volvemos a sumar una mini estatua más a nuestra particular colección. En esta zona encontramos "botas en patinete", de ahí que, a mayores del significado que pueda tener, recuerda a una pista de skate y esta mini estatua es el fiel reflejo de esto. Es una de las más recientes de Budapest y Oli la ha podido apuntar en su lista.
A estas alturas del día nuestros pasos nos llevaban ya a un restaurante que nos habían recomendado (el Paprika Vendéglő). Pero la casualidad quiso que nos encontrásemos un precioso café, en el que pudimos comer, y que no buscábamos, claro. Todo un acierto. Un lugar acogedor y una comida deliciosa.
RESTAURANTES DE BUDAPEST | La Lune Café
La Lune Café es uno de los restaurantes brunch más top de Budapest. A primera vista parace solo un coqueto café pero una vez dentro aún cambia a mejor.
Entras en un lugar con un encanto especial, acogedor y con una decoración cuidada al detalle, sumándole la amabilidad de las chicas que lo llevan.
Pero no solo se puede tomar sus famosos cafés, también comimos de maravilla: una sopa deliciosa acompañada de unos sandwich con guacamole riquísimos (💵 12.410 HUF).
Una maravilla de lugar que encontramos por casualidad y del que no pudimos salir más encantados. Tienes más sugerencias en "Comer en Budapest: restaurantes y platos típicos"
Nuestro siguiente punto del día: La plaza de los Héroes. Una de las plazas más famosas de Budapest, conmemora, con sus estatuas centrales, a los líderes de las siete tribus fundadoras de Hungría.
Unas cuantas fotos para recordarla y continuar por la Avenida Andrássy, la principal arteria comercial de la ciudad con tiendas de lujo y un sinfín de restaurantes. Tanto esta avenida como la plaza de los Héroes están consideradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
RUTA PROPUESTA (ANTERIOR VIAJE)
Si estás repitiendo esta ruta, para que sea completa, la idea original era bajar toda la Avenida Andrássy desde la Plaza de los Héroes y parar en la Casa del Terror y el Teatro de la Ópera de Hungría, incluso tomar un café en Muvész Coffee House, también conocido como Artist Café, se inauguró en 1898 durante la época dorada de Budapest y, como veis, sobrevive en la actualidad. Si vas, no dejes de pedir una de sus especialidades: el café helado con helado de vainilla. Podéis leerlo en el diario antiguo aquí.
Pero como las cosas con Oli van despacio y ya lo habíamos hecho en anteriores viajes, no nos quedó más remedio que dejarlo por esta vez.
En esta "nueva ruta" decidimos coger un Bolt (💵 2.590 HUF) e ir (¿os hemos hablado ya de esta comodísima manera de moverte por Budapest?) directamente al New York Café,.
Ruin Bars de Budapest (y Karavan), la nueva moda
Nuestro paso por el famosísimo New York Café no fue el esperado. Una cola de ¡más de dos horas! nos estaba esperando con los brazos abiertos. Seguro que es una experiencia en sí misma por el lugar del que os hablamos pero nosotros (con Oli o sin Oli) no nos apetecía nada esperar todo ese tiempo por un café. Probablemente la hora no era la adecuada pero era la que nos había "tocado" ese día...¡¡para otra ocasión!! (CONSEJO: Id a primera hora).
El New York Café es la cafetería con más historia de Budapest de antes de la Primera Guerra Mundial. Aquí puedes tomarte el que dicen que es el café más caro de Hungría, seguro que merecerá la pena. Si vas te darás cuenta porqué es uno de los cafés más bellos del mundo. Plan B: Ruin Bars
Estos Ruin Bars se han puesto muy de moda en los últimos años (sí, Oli también ha estado un ratito en uno y ha alucinado jajaj). Están ubicados en edificios antiguos y abandonados que estaban destinados a desaparecer, de esta forma se llegó a un acuerdo de alquileres asequibles para poder transformarlos en estos originales pub donde poder tomarse algo en un ambiente agradable y, sobre todo, sorprendente.
El Szimpla Kert fue el primero. "Fundado" en el año 2002, sus propietarios decidieron crear un espacio donde disfrutar de actos culturales, música en vivo e incluso mercados los domingos. Pero lo novedoso de esta famosa zona, Kazinczy utca, no queda aquí sino que muy cerca se encuentra otro lugar especial: Karavan
Karaván, ubicada al lado del Szimpla Kert, en teoría es un "patio" de comidas compuesto por un sinfín de puestos de comida o food truks en forma, algunos de ellos, de camiones antiguos, donde elegir picoteos varios que se pueden consumir de pie o sentados.
Hay varias opciones de tapeo de las que nos habían hablado muy bien, como son: el Paneer del paraíso del queso, las riquísimas hamburguesas de Zing o la comida italiana del Vespa Rossa. Como puedes ver, aparte de la comida, también puedes adquirir otro tipo de productos como son artesanía o una gran variedad de recuerdos de tu viaje.
Por supuesto no podíamos irnos de aquí sin ver con detalle y detenimiento todas las tiendas tan originales que forman parte de esta calle que deriva en el Gozsdu Udvar, un laberinto de siete patios y callejuelas llenas de restaurantes, comercios y cafeterías donde además encontrar los más originales libros, láminas pintadas o artículos "vintage".
Este era el día ideal y la zona ideal para aprovechar y comprarle el "tesoro" que le cogemos a Oli de cada ciudad que visitamos. Tiene una vitrina muy chula en la que poco a poco completa su particular colección de recuerdos de sus viajes o de los viajes de aventura de su papá, a los que de momento ella no puede ir (todo se andará). En esta ocasión le hemos comprado un soldadito de plomo navideño típico de Hungría (💵 23.530 HUF todos los souvenirs de la tarde)
La vuelta hacia el hotel nos sigue dejando curiosidades que van directas a nuestra lista de cosas que ver en Budapest, como esta "librería andante" que no puede ser más original o haber encontrado otra de nuestras miniestatuas favoritas: "el hombre en bicicleta" de Tivadar Herzi, periodista y activista austríaco-húngaro, al que se le considera el padre del judaísmo tal y como lo conocemos en la actualidad. Aunque la larga jornada tenía una segunda parte...
(Continua el DIA 3 (II): “Nochevieja en Budapest: cena especial y fuegos artificiales“)