Fue ayer, con la Sala de Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Callao (Madrid) llena, cuando dimos por finalizada (¿o no?) una aventura que iniciábamos hace ya unos meses en un vuelo de LAN que aterrizaba en la Isla de San Cristóbal, adentrándonos en un mundo prehistórico de parajes marcianos donde las iguanas nadan, los pinzones se te posan sin miedo o tortugas y leones marinos nadan alrededor jugueteando y curiosos.
También ayer decidimos que fuese la PREMIERE de un vídeo en exclusiva al que hemos puesto mucho cariño y que despertó gran interés en la charla y, como prometimos, aquí lo tenéis hoy.
Pero, ¿por qué ese título tan sugerente? ¿cual fue el motivo que nos llevó a ello?
Galápagos, un viaje a la vida
Con el diario de viaje a Quito y Galápagos ya casi disponible y la conferencia de ayer, poco queda ya que contar que no sepáis de nuestro paso por este archipiélago.
Escenarios como Santa Fé, con su iguana endémica única o sus cactus gigantes o el rojo extraterrestre de Plaza Sur en determinada época del año, llamaban nuestra atención asombrados
Pero Galápagos es mucho más. Es un viaje a la vida de unos seres que han evolucionado aislados a lo que ocurría en la otra parte del mundo, donde humanos nos empeñábamos en acabar con hasta el último ápice de naturaleza.
Sin embargo, el Parque Nacional de Galápagos ha sido protegido de nuestros caprichos y sólo en contados grupos reducidos y controlados es permitido el acceso. Eso hubiese complicado la tarea del mismísimo Charles Darwin en su inspiración de la Teoría de la Evolución pero permite observar imágenes como esta (vídeo no acto para los más sensibles a los "peluchitos")
Viajar por libre a Galápagos es posible, e incluso más económico de lo que alguien podría pensar a priori y de todo ello hablamos en la ponencia de ayer pero también tenéis disponible en nuestros relatos y en El Rincón de Sele
Si sus parajes y su naturaleza no son suficiente motivo para plantearte una aventura así, ni decir tiene que nadar en sus océanos te lleva a uno de los escenarios submarinos más extraordinarios del planeta, como también lo son las cotas altas de las islas, mucho más húmedas donde aparecen otros insólitos seres que dan nombre a este submundo
Galápagos es un viaje a la vida, es una aventura para el amante del planeta más auténtico y virgen que conoce el hombre.
No me queda más que agradecer a toda las personas que nos mostraron su cariño y me hicieron sentir cómodo en todo momento (a todos aquellos que conocíamos -Ana, Ida, Alejandra, Jaac, Sara, ..- y a los que por fin he conocido -Paloma Mazano que gran sorpresa, Iván, Javier, ..). Esperamos que os haya gustado, desde luego para nosotros fue todo un placer
Una pequeña reflexión. Para alguien que ha estado en ese otro mundo llamado Antártida, pero también en los más remotos Mares del Sur, el Ártico Noruego o los volcanes del África perdida del R.D.Congo, y salvando las distancias porque nada así es comparable, Islas Galápagos ha supuesto un colofón a un sueño de pequeño, el sentir de nuevo que abandonaba el mundo de los hombres para adentrarme en un universo paralelo donde animales y personas vivimos en absoluta convivencia pacífica. Y eso, no hay interés económico que pueda con ello.
Isaac (junto con Sele), en la Conferencia "Galápagos, un viaje a la vida" (Madrid)