Disneyland California, donde nació la fantasía

Amanecía un nuevo día en Los Ángeles. Estábamos especialmente contentos porque a partir del medio día nos vendrían a buscar para llevarnos a uno de nuestros lugares preferidos “Disneylandia California” y es que ¡somos como niños!.

Me refiero, no a nuestros hijos que lo eran entonces, sino a nosotros también porque la realidad es que disfrutamos el año anterior de Disneyworld en Orlando como si lo fuéramos y esta vez íbamos a ir al primero de estos parques temáticos.. Disneyland California, donde nació la fantasía

Indice

En este artículo de la guía de California y Hawaii (10 posts) podrás leer lo siguiente:

• Disneyland California, regresamos al mundo Disney

Leer más

DESCUENTO IATI

DESCUENTO ESIM

DESCUENTO COCHE

-%

TODOS

Disneyland California, regresamos al mundo Disney

Disneyland California es el que dio lugar a todos los que vendrían después en el mundo y que por suerte conocemos. No nos perdemos, desde entonces, ni uno de ellos, siempre hay algo nuevo por descubrir y disfrutar y es tan bonito vivir un día mágico en un mundo de fantasia que no tiene nada que ver con la realidad cotidiana.

Por la mañana anduvimos recorriendo el Downtown hasta la hora de la comida, en la que la opción en Estados Unidos, suele ser la consabida hamburgesa, que tan poco me gusta, aunque allí parezca ser la reina del lunch. Volvimos al hotel, nos sentamos en su acogedor living esperando que nos recogieran para nuestra esperada aventura, je, je.

A la hora acordada se presentó un chaval de unos veinte años, español, que pasaba el verano trabajando como guía en Los Ángeles. Nos montamos en una furgoneta y fuimos contemplando la gran extensión de esta ciudad por las ventanillas, ya que el parque Disneyland California se encuentra a las afueras, como se puede suponer.

Disneyland California es un parque temático diseñado por Walt Disney y situado en Anaheim, California. Fue inagurado el 17 de julio de 1955 y desde entronces, que ya ha llovido, existen en el mundo unos cuantos más para placer de un montón de soñadores como nosotros. Su seña de identidad en casi todos los parques de este tipo es el castillo, entorno al cual se desarrolla todo lo demás.

Pasamos toda esa tarde subiendo y bajando de las atracciones y grabando todo cuanto veíamos, teniendo en cuenta que en esos años era cuando empezaban las cámaras de vídeo a utilizarse, pretendíamos llevarnos cada segundo con nosotros para después disfrutar durante el invierno recreándonos en la visión de esos momentos, pero nada más lejos de la realidad, porque todos sabemos que después de haber vivido algo singular, la única cosa que puede revivirlo es el pensamiento y el recuerdo, porque las imágenes grabadas acaban siendo un rollo para ti y para todos aquellos a los que se las pretendas enseñar.

En fin, que es mejor grabar alguna secuencia cortita para tener un recuerdo real de un momento concreto que pasarte en el tiempo de grabación. En resumen, como todo lo nuevo, uno siempre paga la novatada y allí estuvimos grabando y por supuesto disfrutando de cada instante visitando las distintas partes en que se dividía entonces el parque, Main street, Adventureland, Frontierland, Fantasyland, Tomorrowland, cada una a cual más increíble y divertida. Este parque en el año 2001 fue ampliado y reformado.

¿Una atracción favorita? Nos encantan todas, pero si hay una que subiríamos una y otra vez es It's a Small World, el pequeño mundo representado por muñecas mientras navegas con una barca por él

Disfrutamos también, como no, de sus vistosos desfiles, el del mediodía y el de la luz en la noche, donde pareces entrar en un túnel de magia sin fin, además tuvimos la suerte de presenciar un espectáculo nocturno increíble que se llamaba “Fantasmic” y se representaba en el lago, que nos dejó boquiabiertos, sin palabras. ¡Mágico, mágico, mágico! es decir poco. Había que verlo para saber la cantidad de sentimientos de niño que te despertaba.

En fin .. !que no había nada ni nadie que nos sacara del parque! hasta que concluía el día con los fuegos artificiales, el himno americano y se disponían a cerrar sus puertas, no nos quedaba otra que marcharnos fascinados a la cama donde caímos, un día más, completamente rendidos

Mª Carmen (y la familia Chavetas)