Un día más el Ártico nos acoge. Hoy los buenos días los damos en Ymerbukta, y nos hemos levantado con otro ánimo, si cabe más contentos, a pesar del frío que hemos pasado esta noche, que ha sido mucho. Por poner una nota negativa, hoy hemos podido comprobar en Ymerbukta un claro ejemplo de lo que el calentamiento global está ejerciendo sobre cualquier glaciar ártico... !!y es una verdadera pena!!
Hoy, por primera vez para mi, caminaremos sobre un glaciar... y eso no lo puedo contar todos los días
Hacia el glaciar ártico en Ymerbukta
Como ya os contábamos en el artículo anterior, la bahía de Ymerbukta es uno de los lugares más bonitos y conocidos de Svalbard, aquí hemos pasado la noche ya que al día siguiente nos pondríamos por primera vez los crampones para hacer trekking sobre el glaciar Esmarkbreen con un frente de casi tres kilómetros de largo. !!Esto sí que es una experiencia única más en el extremo ártico!!!
Como todos los días un completo desayuno nos espera, pero hoy tenemos una pequeña sorpresa que nos dará unas cuantas calorías más para ayudarnos con nuestro “ paseo” de hoy. Ummmmm huele riquísimooooo!!!! Chocolateeeee!!!!
Con las pilas cargadas, todos menos David, que hoy lo hemos dejado descansar un poco de nosotros, nos preparamos para un nuevo landing dispuestos a contemplar otra maravilla de la naturaleza.
Como siempre Jytte está atenta a cualquier cosa que necesitemos y en esta ocasión sí que la necesitamos y mucho… "¿estos crampones cómo se ponen? ¿Pero cuántas vueltas hay que darle para que queden apretados?" Nota mental: caminar con las piernas un poco abiertas para no lastimarnos.
Hace un día soleado como ya Svalbard nos tiene acostumbrados y el efecto que hace en el hielo es espectacular. Esto parece más un decorado preparado que la postal real que nos encontramos, pero es verdad seguimos en el Ártico y lo vamos a disfrutar hasta el último momento porque es un privilegio el poder estar aquí.
Ya preparados como si de un equipo profesional de escalada se tratase, al menos con ese espíritu vamos, emprendemos la marcha, expectantes por saber lo que nos encontraremos en este primer trekking por un glaciar . Carmen, Fernando y yo nos lo tomamos con calma, no resulta fácil caminar por el hielo con nuestros “particulares patines “ aunque Fernando más que ese motivo, sabemos que es el de no quitarnos ojo a Carmen y a mi, por si acaso metiéramos literalmente la pata en algún agujero mal disimulado, jejejeje.
Isaac, concentrado con su cámara, preparada para que nada se le pierda, Jytte junto con Ivone marcando el paso y Ana y Guille grabando tomas para su documental. Todos con distintos objetivos pero con la misma ilusión.
Y desde luego Esmarkbreen no nos defrauda, al contrario, nos quedamos maravillados con lo que vamos descubriendo, auténticos “agujeros negros” que el deshielo va formando en esta época. !!Es un espectáculo de la naturaleza que no habíamos visto jamás!! Son decenas de metros por los que caer podría resultar mortal.
Sólo el hecho de intuir la profundidad que tendrá nos pone la piel de gallina, vaya estampa y saber que esto cada día disminuye un poquito más, !!qué pena!!! Hasta que nos carguemos todo el planeta no vamos a parar...
Seguimos subiendo, seguimos viendo formas que la naturaleza va dibujando de forma caprichosa y nosotros como no, aprovechamos cualquier momento para hacer un poco el tonto,
Si el otro día parecíamos los protagonistas del Señor de los Anillos acompañando a Frodo, hoy podemos pasar por los integrantes de una expedición del mismísimo Amundsen, aunque hay que tener en cuenta que han pasado muchos años de aquellos. Eran verdaderos portentos esta gente...
De todas formas en la época en la que estamos, verano, el glaciar no se muestra con su color normal como una gran manta blanca sino que por el deshielo, las montañas de su alrededor se dejan ver en su tono marrón original que hace que el glaciar parezca “sucio”.
¿Pero Isaac que estás pidiendo de rodillas? Ahhhhh ya sé….el dejar de ser TAN INQUIETO!!! Sí seguro que es eso….
De todas formas aquí en semejante paraje no podíamos dejar pasar la oportunidad de hacernos una foto todos acordándonos de la Abuela Chavetas, aunque no necesitamos esto para recordarla sí es un bonito detalle por parte de todos en general y un recuerdo entrañable para los Chavetas en particular. Abuelona esta vez nada más y nada menos que en el Ártico, como tú dirías “cada día me lleváis más lejos” jejejeje
Fernando, necesito que me hagas un favor….tú arrímate bien a Isaac a ver si se le pega algo del nombre de tu proyecto La Mar en Calma (muy recomendable para todos los amantes de la navegación y !!no os perdáis la Wiki Náutica!!). No nos cansaremos de decir que, junto con David, eres una de esas personas que te quieres encontrar en tu vida, es igual cuándo, porque parece que siempre has formado parte de ella…
Es hora de regresar y de despedirnos de esta nueva experiencia que ya guardaremos en nuestro álbum de recuerdos.
El picnic más frío del planeta, un picnic ártico
Con mucho cuidado volvemos sobre nuestros pasos. Jytte sigue vigilando que no vayamos por esas zonas que parecen más delicadas, especialmente por el efecto del calentamiento, y donde pisar podría resultar peligroso, hasta que finalmente volvemos a poner pie en la "playa".
El sol apenas gira sobre nosotros, pero no supera una altitud muy baja durante todo el día, dejando a la noche los colores más bonitos aunque en esta época del año cualquier hora es buena
El hambre aprieta, aunque hoy no comeremos en el barco, hoy nos hemos traído un pequeño picnic para poder alargar así nuestra estancia en este espectacular glaciar, y como buen “ Calleja “ que se precie, nosotros hemos aprovechado para sacar del fondo de nuestra mochila un poco de jamón, que gracias a la mami de Isaac, nos ha venido de perlas por Noruega y por supuesto aquí en el Ártico. ¿Alguien quiere un poco? !!!Ehhhhh uno a uno!!!!
Aunque hay productos que ni en las peores condiciones de subsistencia son tragables (con humor, por supuesto, ya lo quisieran en muchos lugares del planeta). !!Madre mia para la lata de jamón cocido de turno!
Y así con nuestro glaciar de fondo improvisamos una comida al más puro estilo campestre, ¿quién puede decir que no somos originales?
Mañana ponemos rumbo de regreso a Longyearbyen. Nuestra primera visión parcial del Ártico en Svalbard (Noruega) acaba aquí y aunque ha tenido encuentros apasionantes con renos enanos, zorros árticos, simpáticos frailecillos o bonitas focas peludas, nos queda la pena de que el calentamiento global se haya llevado los osos polares a latitudes más al norte en esta parte del planeta. Eso nos presenta nuevos retos y nuevas aventuras... !!y no pararemos hasta conseguirlo!!
Isaac y Paula, desde Ymerbutka (Ártico Noruego)
Noruega es otra cosa... dos veces hemos estado ya con un total en el pais de 50 días y seguro que volveremos, es como euskadi pero a lo bestia.
Nosotros estuvimos en el glaciar briksdallbreem o como se escriba jejejeje
Jajaj, me ha gustado ese "es como Euskadi pero a lo bestia". Desde luego, sois verdaderos especialistas ya en el destino 😉
que envidia yo tengo una foto en Alemania en un glaciar hace 21años y es espectacular solo que era en verano
Jose, jaja, tienes razón... Es que Paula es mucha Paula
Jordi, la verdad es que tienes toda la razón, los presupuestos son elevados en estos sitios tan exclusivos. Nosotros por el concurso de Paula, sino tampoco podríamos habernoslo permitido pero hay mucha gente que si.. y la verdad es que es todo un sueño
Menuda envidia de viajecito!!! Tu aventura me ha animado a mirar presupuestos, pero rediós, se nos va un poco, o sea que de momento, quedará en los debes, y me conformaré con Islandia...
Precioso el lugar. Se os ve con un poco de frio. Por cierto me llegó la camiseta de México. Muchas gracias de nuevo. Cada vez que me la ponga me acordaré de vosotros
Oleeee Ana Maria!! Es un pequeño detallito, nada más... pero que tengas un recuerdillo 😉
Que foto mas chula!!! 🙂
Eiii! Muchas gracias Marta! Eso es por el paraje, jeje
Pues no voy
Jajaj! Tampoco es para ponerse así 😉
Vaya tela con el picnic!! Lo prefiero al ladito de la playa jaja
Tampoco nos vamos a engañar... si es cuestión de picnic, nosotros también, jaja
Por fin un relato bien escrito.............juajua.
espectaculares esos glaciares
Esos agujeros dan mucho miedo, pero deben de ser una pasada!
La verdad es que es una impresión importante verlos tan cerca y tan grandes. Parece increíble que se formen este tipo de "esculturas" 😀
Ah, así que podrías caer y ser mortal... Qué pesimistas xD
Jajjaja! Ya nos tardabas tú... 😛
Que yo ahora soy superpositiva 😀
Di que si Cris, por una vez que mataste un gato...no les hagas ni caso 🙂
joder q miedo!!!!
La verdad es que nunca pensamos que caminar por un glaciar pudiera tener peligros como esos agujeros que dios sabe donde acababan... 😛
ni yo!!! buff acojona solo pensarlo