Necesito un mundo paralelo para recordarte.
Ese que tu anhelabas dentro de tus silencios
Ese que nunca hallaste por más que lo buscaras.
El que nunca existió, solo en tus sueños.
Necesito recordar tu bondad y tu mirada.
Ese altruismo inagotable que habitaba en las profundidades
de tu gran corazón.
Y cuando piense en ti, imaginaré esa vida que realmente deseabas,
no aquella que encontraste llena de decepción.
Quiero pensar que en cada una de las experiencias
de nuestros simples días
habitan quimeras alcanzables,
esas en las que tu creías, por las que trabajaste con tesón
para construir tu mundo bondadoso, una justicia eterna,
que nos hiciera iguales, en el que todos caben
sin distinción de almas, de sueños o color.

Código de ética
El 97% de artículos de este blog, como este que estás leyendo, son de contenido original creado por nosotros basado en nuestras propias experiencias sin que ninguna marca o empresa haya influenciado de ninguna manera en él. De entre los enlaces puede existir (o no, pero por si acaso avisamos para ser completamente transparentes contigo) alguno que contenga afiliación que nos pudiera generar algún ingreso extra sin ningún coste en absoluto para el lector. Libre