¿Te imaginas vivir en un lugar donde el sol abrasa la tierra, el agua escasea y el ganado es tu única riqueza, como lo hace la tribu Himba? ¿Te imaginas conservar, por decisión propia a pesar del evolucionado entorno, las mismas costumbres y tradiciones que tus antepasados hace siglos? ¿Y ser parte de una de las últimas etnias de Namibia? Nosotros no solo lo imaginamos, sino que lo vivimos en una ruta que nos llevaba a la puerta sur de Ethosa, Anderson Gate.
Sin embargo, tengo que admitirte que nuestra visita a un poblado himba, donde conocimos a esta curiosa y bella tribu que nos cautivó con su cultura, su historia y su hospitalidad, me ha dejado sentimientos encontrados que todavía estoy procesando...
- Ruta del día: Twyfelfontein - Kamanjab - P.N. Etosha
- Tribu Himba, la última etnia nómada de Namibia
- Parque Nacional Etosha, vida salvaje en Namibia
Ruta del día: Twyfelfontein - Kamanjab - P.N. Etosha
Hemos madrugado para poner rumbo a Kamanjab y conocer un pueblo Himba para llegar posteriormente a otro gran tesoro de Namibia, el Parque Nacional de Etosha (Clic para Google Maps)
🗺️ RUTA DEL DÍA
🏨 HOTEL ELEGIDO
A 10 km de la Puerta de Andersson, por la carretera C 38, un campamento base rodeado de sabana de mopane, ideal para relajarse tras una jornada de safari. Ya puedes leer nuestra review en "Etosha Safari Camp, opinión de un paraíso al sur del parque"
El viaje llega hasta otro de sus grandes atractivos. Acordaos que yo estoy haciendo una de las salidas de este Viaje a Namibia en 12 días de Mopane Safaris.
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Tribu Himba, la última etnia nómada de Namibia
Hoy no hemos madrugado tanto en el Damara Mopane Lodge donde llegamos anoche. La atmósfera de este lugar es maravillosa y ya puedes leer nuestra review en "Damara Mopane Lodge entre Twyfelfontein y Ethosa, opinión"
Un desayuno tranquilo invita a comenzar una nueva jornada por Namibia en un viaje cargado de sensaciones y contrastes. A estas alturas ya puedo decir que no lo esperaba tan impactante y se ha situado en mi TOP de viajes por el mundo...
Check-out, explicación de George de lo que vamos a hacer y unos 120 km (1 hora 30 min) de trayecto para la primera visita del día.
La tribu Himba es una de las joyas de Namibia para amantes de lo etnográfico, un pueblo que ha sabido preservar su identidad y su cultura a pesar de las adversidades y los cambios que ha vivido el continente africano. Son seminómadas, criadores de ganado, que habitan en el árido desierto de Kunene, al norte de Namibia y sur de Angola aunque se pueden encontrar poblados en este área y ¡aquí estamos!
Este tipo de visitas siempre las he intentado tratar, al menos desde el blog, con cierto respeto. Entiendo que somos turistas en una tierra en la que apenas vamos a percibir parcialmente la historia de un pueblo y que no dejamos de ser un ingreso económico para subsistir. Pero además de poder entender su historia y sus costumbres, para ello te abren la puerta de su casa, sus niños, su intimidad... Su estilo de vida se basa en el respeto a la naturaleza, a sus ancestros y a sus tradiciones y ese mismo respeto deberíamos tener nosotros con ellos, aunque no siempre se consigue...
Lo primero que llama la atención es inevitable. Incluso más allá de ese rojo que teñirá la visita.. y es la sonrisa que nos reciben. Estamos 7 km del pueblo de Kamanjab, en pleno territorio himba, en una pequeña aldea donde vemos sobre todo mujeres y niños...
Los himba (leído "jimba") son conocidos por su belleza, sus peinados elaborados y su piel rojiza, producto de una mezcla de ocre, manteca y hierbas que usan para protegerse del sol. Los detalles son infinitos por todo su cuerpo, con adornos de piel de vaca y cuero que tienen cada uno su propio significado. Por ejemplo, el brazalete de meta en el tobillo con una línea negra pintada significa que ha parido una vez, y si hay más de una, ha parido más de una vez.
Los himba son un ejemplo de dignidad, de sabiduría y de valor, que nos invitan a conocer su mundo y a aprender de su forma de ver la vida.
Un poco de historia de los Himba
La historia de la tribu Himba en Namibia es una historia de resistencia, de orgullo y de supervivencia. Son descendientes de los herero, una tribu que se separó hace unos doscientos años. Allí desarrollaron un estilo de vida adaptado a las duras condiciones climáticas y a los escasos recursos naturales.
Han tenido que enfrentarse a numerosas adversidades a lo largo de su historia. En el siglo XX sufrieron los intentos de exterminio por parte del gobierno colonial alemán, la guerra entre Sudáfrica y Angola, y las sequías que amenazaron su subsistencia. También han tenido que lidiar con la presión del turismo y la modernidad, que han traído consigo elementos nuevos y ajenos a su cultura, como los dulces, el alcohol o las enfermedades.
Llama la atención también el poblado, kral, circular donde viven llamado onganda, rodeado de matorrales para evitar los animales salvajes y las casas circulares en forma de cabaña de paja y barro.
Existen áreas de despensa en lugares más elevados, una zona bajo un mopane donde el jefe del poblado realiza el fuego sagrado que se encuentra siempre encendido y un recinto circular en el centro para guardar el propio ganado que les da la subsistencia y son parte importante de los acontecimientos del pueblo (bodas, nacimientos, rituales..)
La realidad es que actualmente los himba son una etnia semi-nómada. Se dedican a la ganadería pero se van moviendo en busca de agua y comida para el ganado. Según vamos avanzando vamos viendo diferentes facetas como el cuidado de los niños, la vestimenta y hasta como realizan una especie de sopa para alimentarse, desafortunadamente con apenas sustancia.
Entramos en una cabaña donde vamos a asistir a una especie de ritual que sirve para su aseo personal y otros usos. Y aquí no se como transmitirlo pero he tenido esa sensación con la que empezaba ese relato de relato encontrado. He percibido TRISTEZA, infinita tristeza en esa mirada.
El pueblo himba ha decidido vivir ataviados con numerosos collares y brazaletes, con apenas unos harapos, al margen de la sociedad occidental implantada en Namibia durante ya mucho tiempo. Al contrario que hereros o damara, ha sido su decisión, pero, intentando ser respetuoso y responsable en estas líneas, ellas no se si lo perciben así. Eso si, es un caso distinto a los bosquimanos que conoceremos en Nyae Nyae en los últimos días.
La visita termina en una zona donde todas las himba que hemos ido viendo nos ofrecen su artesanía y creaciones, una forma de recaudar (yo me he traído un pequeño tesoro para Oli por 💵 300 NAD) de forma pacífica y nunca está de más poder aportar algo dentro de este viaje respetuoso y responsable por su poblado. Y a lo mejor soy muy pesado con ello, pero al final al escribir este blog siento una cierta responsabilidad al respecto.
Los himba son monoteístas de un ser supremo llamado "Ndjambo" al que asocian a la lluvia, los truenos y los relámpagos. ¿Y los hombres del poblado? Lo cierto es que no hemos visto mucho pero parece ser que son los encargados de pastar las vacas y ovejas así que estarían en ello... quizás.
Parque Nacional Etosha, vida salvaje en Namibia
Lo dicho, con ciertos sentimientos encontrados, tenemos otras 2 horas de trayectos (180 km) a la puerta Anderson de un escenario de vida salvaje que viene buscando mucha gente en Namibia.
Como llegamos en torno a las 13'00, es buena hora para dejar las cosas en el alojamiento, refrescarnos y comer algo ligero (💵 250 NAD) para aprovechar la tarde para nuestro primer safari.
HOTEL EN EL P.N. Etosha | Etosha Safari Camp
Este simpático campamento de safari ofrece un alojamiento cómodo entre los árboles de mopane, una bonita piscina redonda y un camping con mucha vegetación. Inspirado en Etosha como un ‘Lugar de Leyendas’, acerca la historia y el alma de África.
🍹 Alberga el típico bar informal o shebeen, tan popular en el sur de África, y se recrea en el restaurante Okambashu (‘Nuestra casa’) y en el bar Oshebeena con colorido local y objetos rurales. Tienes ya nuestra review en "Etosha Safari Camp, opinión de un paraíso al sur del parque"
Sobre el Parque Nacional Etosha, uno de los parques más grandes y diversos del mundo, hablaré detalladamente en el artículo de mañana. Hoy solo voy a contaros la experiencia vivida.
Y es que Ethosa es algo diferente a la experiencia que puedes vivir en un Masai Mara o un Botswana, más de carreteras y de ir de charca en charca. No por ello el avistamiento de fauna salvaje deja de ser menos especial desde que entras por sus puertas.
Etosha significa “el gran lugar blanco”, por el enorme salar que ocupa gran parte del parque y que se puede ver desde el espacio. El salar se forma por la evaporación del agua que llega al parque durante la época de lluvias, y crea un escenario único y espectacular.
Alrededor del salar hay diferentes ecosistemas, desde bosques bajos hasta sabanas abiertas, donde habitan más de 100 especies de mamíferos, 340 de aves y más de 100 de reptiles. Y también de waterholes (charcas de agua) donde donde se acumulan una gran variedad de animales salvajes en su hábitat natural. Antílopes de todo tipo, cebras, ñus y oryx son nuestros primeros avistamientos.
Por cierto, el plan para visitar Ethosa me ha gustado mucho y está muy bien pensado. Hoy vamos a profundizar en el área de Okaukuejo hacia el Noroeste y mañana atravesaremos el parque de norte a sur, pegándonos un capricho final en un alojamiento brutal recién abierto, lo que nos permitirá recorrer con calma todo Halali y Namutoni, sin tener agobios por volver.
Hacemos una parada en el Okaukuejo Resort, ideal para aquellos que quieran pegarse un capricho en el corazón del parque. Hay unas cabañas que tienen "visión directa" a una charca donde parece ser que se han llegado a ver cosas extraordinarias como un rinonceronte negro devorado de noche por leones a pocos metros. Algo que solo puedes vivir si estás dentro, porque el resto tenemos que salir del parque antes del atardecer.
En todo caso, la tarde entre charca y charca, con nombres tan sugerentes como Adamax, Aus, Gaseb, Gemsbokvlakte, Grünewald, Homob, Kakupuhedi, Leeubron, Natco, Nebrownii, Okondeka, Olifantsbad, Ombika, Ondongab, Ozonjuitji m’Bari, Sprokieswoud y Wolfsnes (no hemos ido a todas, por supuesto), no se nos ha dado mal y hemos localizado chacales ....
... y una ESPECTACULAR manada de leones "durmiendo la siesta" en lo alto de una colina muy fotogénica.
Alguna leona llevaba un collar de seguimiento. Se ve que estaban realizando un rastreo sobre ellos para algún estudio o similar.
Hemos visto también precioso Oryx con la última luz del día, el animal favorito de Ana y escenarios preciosos de esta época del año, recién acabadas las lluvias.
La hiena tampoco ha faltado a su cita y, con ella, los puntos para David y Paloma, que se "destacan" en nuestra particular "porra" que no falta en ningún viaje de animales desde Botswana. Un forma divertida de ganarse unas cervezas por las noches (o tener que pagarlas, aunque en todo caso, las rondas no fallan).
¡Qué bonitas las jirafas! Si ya lo son habitualmente, con esta luz más. Parece ser que se trata de una Jirafa ahumada o Jirafa de Angola.
Ya cerca de la puerta por la que entramos, al Sur de Ethosa, en torno a las 18.45 que se comienza a ir la luz, vemos los últimos Oryx y un bonito atardecer.
¿Sabéis lo que más me gusta de un safari? Bueno, dejando a un lado el propio safari. Todo lo que le rodea. Esos momentos de anécdotas y cervezas en la vena, ese ambiente que se respira y ese tipo de lodge pensado hasta el último detalle para disfrutarlo en plena naturaleza, donde puedes ver hasta mangostas apareándose en frente de tu aislado bungalow.
La cena tipo buffet del Etosha Safari Camp fue de las mejores que hemos disfrutado estos días, y la botella de "amarula", una crema de licor que no falta cuando viene David, bajo que da gusto, jaja.
Despedimos otra jornada apasionante que nos ha mostrado el África de la diversidad, de un pueblo Himba que resiste a los tiempos como la última etnia nómada de Namibia y de un parque de vida salvaje que mañana promete ser uno de los más fascinantes del viaje. ¿Madrugamos?
Isaac con el grupo Mopane, desde el P.N. Etosha tras visita al pueblo Himba (Namibia)
💵 GASTOS DEL DÍA: 250 NAD (apróx 12,10 EUR) [y REGALOS: 300 NAD (apróx 14,52 EUR)]