Parece mentira como pasan los días, casi sin darse cuenta, cuando uno está fuera. Ya estamos en el último día de este miniviaje a esta zona sureste de China y la verdad es que nos quedamos con ganas de más. Seguro que volvemos muy pronto. Aún así, no queríamos irnos de Hong Kong hoy sin poder visitar esas otras caras que no aparecen en las postales o en los iconos más vistos. Es por ello que hoy vamos a conocer un poco más la zona sur de la isla de Hong Kong y una particular experiencia en la isla de Lantau.
Hoy no madrugamos, tras varios días haciéndolo. Desayunamos tranquilos en el Harbourview Hotel (análisis completo del alojamiento en ESTE ARTÍCULO) y nos acercamos al metro (4 HKD por persona) para llegar a Central Station, desde donde coger un bus (7.90 HKD por persona) en la Central Exchange (números 6 / 6A / 6X / 66) hacia el pintoresco pueblo de Stanley, al sur de Hong Kong.
A TENER EN CUENTA:
Los buses requieren el importe exacto, no dan cambio. Si quieres redondear a la alza es problema tuyo.
La ruta nos lleva por los preciosos parajes de Repulse Bay, donde vemos las primeras playas del viaje y una especie de pueblos parecidos al sur de España. En más o menos 40 minutos "a toda leche con el bus" (parecen "kamikaces") ya hemos llegado. Por suerte no hemos cogido demasiado atasco de salida de la ciudad, que es un colapso permanente siempre.
Lo primero que nos encontramos al bajar es su famoso mercadillo, Stanley Market, un mercadillo permanente mucho más tranquilo que la locura del Temple Market o Lady Market, con prendas de todo tipo y souvenirs, pero algo más caro.
Yo particularmente sigo sin encontrar nada que me emocione, aún así llevo algún regalito más (240 HKD). Eso si, las chicas se ponen "la botas".
Aunque es una comparación un poco absurda, Stanley tiene un cierto aire a la ciudad en la que vivimos, A Coruña, por su forma de península con dos paseos diferenciados. El primero tiene la playa principal, y en el que hemos ido a parar está un paseo marítimo muy agradable, relajado y más rural.
Hay también un montón de terracitas, lo cual indica que por las tarde/noche se debe poner la zona muy muy animada. Curiosamente, todos los negocios que vamos encontrando son extranjeros, un pub irlandés, un café francés, un pub inglés, un restaurante vietnamita ... !! siiiiiiii !!, y hasta un restaurante/bufet español llamado MIJAS RESTAURANT
Con nuestra costumbre muy portuaria de "recorrer espigones" llegamos hasta el "Blake Pier at Stanley", desde donde está saliendo alguna embarcación a estas horas
No podíamos irnos de aquí sin antes tomar un cervecita fresquita (152 HKD todos) en una de las terracitas, !! eso que no falte nunca !!. De ahí volvemos a la estación de buses (que no deja de ser una plazoleta con varios buses) en el punto que hemos partido y vamos a seguir bordeando la costa hasta Aberdeen en bus (número 73 por 3.90 HKD)
Aberdeen es un lugar que nos ha sorprendido de verdad, no ya por su localidad, que no la hemos visitado, sino por su Bahía comprendida entre ella y la isla de Ap Lei Chau, una isla a escasa distancia y con varios edificios altos y rascacielos también. El contraste entre éstos y pequeñas casas flotantes de pescadores es, sin duda, la imagen más curiosa del Hong Kong tradicional.
Hay varias embarcaciones de la propia gente del lugar que te ofrecen paseos de 1 hora por 120 HKD, que empiezan a bajar proporcionalmente en tiempo y dinero a la distancia que te vas alejando de los pesados vendedores, llegando a 30 o 40 HKD por 30 minutos. Nosotros hemos decidido coger el transporte gratuito hacia el Jumbo restaurant, que igualmente te da un paseo por la bahía y donde podemos observar que no sólo hay casas flotantes de pescadores, sino que alguno vive en su propio barco
Es increible ver como entre décadas de porvenir y riqueza ha sobrevivido una cultura tan ancestral, tanto como los barcos y estructuras de madera que hoy por hoy se encuentran tan deteriorados. Y es que Hong Kong no sólo es la imagen del skyline.
Otro de los grandes aciertos del día se llama Jumbo Kingdom, uno de los restaurantes más famosos de todo Hong Kong
Se encuentra ubicado en la parte más rica de la bahía, donde las viejas casas dejan paso a verdaderos yates de lujo. Aquí vamos a comer hoy
Nos encontramos en el RESTAURANTE FLOTANTE MÁS GRANDE DEL MUNDO, con capacidad para más de 2.000 personas, y una de las joyas del turismo de la región. Como es nuestro último día, vamos a darnos un pequeño homenaje, y por ello nos decidimos por el restaurante el piso de arriba (hay otro en el segundo piso de comida moderna cantonesa) y pedimos unas gambitas, un cangrejo relleno, un arrocito con muy buena pinta ....
... y un esquisito, riquísimo, sabrosísimo (y cualquier adjetivo que se quedaría corto) PATO LAQUEADO, que no puede faltar en cualquier viaje a China
El lugar hay que reconocer que está preparado para el turista, pues se ve que vienen multitud de grupos traidos por su guías a comer aquí, pero he de reconocer que nos hemos pasado el rato más divertido de todo el viaje, uno bebiéndose el agua de lavar las manos, el otro liándola con el arroz, otro comiéndose las guindillas del adorno, ... Eso si, la calidad de la comida ha sido excelente, así como el precio (1408 HKD), que ronda los 25-30 euros/pers
Volvemos a poner pies en tierra para, llegando a la estación de buses de Aberdeen, poner rumbo al punto inicial, Central Exchange (bus número 75 por 4.70 HKD). De ahí nuevamente metro (21 HKD por persona) hasta Tung Chung, para salir en un centro comercial inmenso y coger otra experiencia para un gran día, un teleférico
Estamos en el cable car, teleférico, también llamado NGONG PING 360 EXPERIENCE (169 HKD por persona) que hace un trayecto desde Tung Chung hasta el Ngong Ping Village.
Estamos, también, ante uno de los teleféricos más largos del mundo, con unas panorámicas excepcionales (se puede ver el impresionante Aeropuerto Internacional con terreno ganado al mar desde el que saldremos mañana), de más de 8 km de longitud.
Además hemos elegido, de los dos tipos de cabina, la cabina de cristal en el suelo, y vamos viendo un camino que le encantaría al "tio Jose" para perderse por el "prado" y subir a ver al famoso Gran Buda. Realmente, éste se puede ver una vez llegado al pueblo con "sólo" subir 200 escaleras.
Acumulamos cansancio y ya se está haciendo tarde. El pueblo parece un lugar agradable que congrega restaurantes, centros de ocio, tiendas, el Monasterio Po Lin (con más de un siglo de historia) y el, ya comentado, Gran Buda. que simboliza la unión del hombre y la naturaleza y que nos recuerda mucho al enorme visto en Kamakura aquel DIA 14 del viaje a Japon 2008. Pasamos un rato por allí, aprovechamos para tomar unos heladitos (30 HKD) ....
.. y volvemos hacia el punto de partida, volviendo a disfrutar de una gran experiencia recomendable para todo el mundo (los que sufran de vértigo, abstenerse de cabina de cristal)
Y como despedida, no queríamos perdernos de ninguna manera, el poder disfrutar de nuevo del Symphony of Lights. Metro (21 HKD por persona) y Star Ferry (3 HKD por persona en fin de semana) desde Central, nos ponen en la Avenida de las Estrellas en Tsim Sha Tsui. Hay cruceritos muy chulos desde los que también puede hacerse, pero se hace muy tarde si no se cena en ellos
Aunque ya lo comentaramos el pasado DIA 6 del viaje, sigue pareciéndonos un espectáculo falto de fuerza, y es una verdadera pena. El sonido está muy bajo y la música es poco emotiva. Aún así, el espectáculo de luces, rayos y edificios "bailando" al son de la música merece la pena. Allí se agolpan miles de personas para poder verlo.
El día no da para mucho más. Volvemos a coger el Star Ferry (3 HKD por persona), esta vez hacia Wan Chai, y como hicimos en la comida, nos volvemos a pegar el capricho de despedirnos con una cena que nos había encantado también ese DIA 6 del viaje, en el restaurante "Al Dente" (951 HKD). Atrás dejamos días intensos en otro rinconcito del mundo que merece mucho la pena visitar. Mañana pondremos rumbo a Madrid vía Moscú, 10 horas, más 2 de escala, más otras 5 horas, vamos, una siestecita. Hasta entonces, un abrazo muy fuerte a todos. Familia, lectores y amigos....
Isaac & Familia, desde Hong Kong
GASTOS DEL DÍA: 3503 HKD (apróx 316,19 euros) [y REGALOS: 240 HKD (apróx 21,66 euros)]
Espero que no se os haga larga la vuelta. Comerte tantas horas de avión para llegar a casa ... se sufre de otra forma cuando se va a visitar algo.
Veo que cogisteis la cabina de cristal, impresiona eh?
Un saludo a todos
Una pena que el viajecito llegue a su fin. Se nota que habeis disfrutado mucho.
Por cierto, en ese teleférico con suelo acristalado a mí no me verán... ¡Qué miedo!
¡Un saludo chicos!
Yo que te puse en la anterior entrada,que te faltaba ver el gran buda...ya veo que va ser que no.
Veo que os lo habeis pasado genial todos.Por lo que he leido en el relato no te ha resultado tan dificil moverte por Hong Kong.
Pronto te volvere a leer en otra aventura viajera de las tuyas,como eres un culo inquieto...je,je.
Saludos y un abrazote