11 experiencias en Lanzarote para disfrutar al aire libre

Playas y relax, pero también naturaleza, deportes o paseos al aire libre, gastronomía y vinos y esos espacios abiertos que todos buscamos en algún momento, especialmente en estos tiempos que corren. Lanzarote no es la isla diferente por casualidad, tiene "algo" que va más allá del turismo de sol (también uno de sus grandes valores) que la hace especial como ya pudimos comprobar años atrás cuando pasamos unos días inolvidables en este paraíso. ¿Serán sus paisajes volcánicos, a veces marcianos, su Parque Natural o sus singulares obras de arte mimetizadas con el entorno? Posiblemente la congregación de todos estos elementos invita a gozar del paraje como en pocos sitios y por ello hoy os traemos estas 11 experiencias inolvidables en Lanzarote que te harán decantarte por esta isla en tu próximo viaje.

Podemos enumeraros muchos secretos que te invitan a descubrir esta maravillosa isla, casi todos fruto de la naturaleza. Agua, aire, fuego, tierra... fueron los encargados de convertir a Lanzarote en el destino único que es hoy en día. Te contamos actividades únicas que puedes disfrutar en esta preciosa isla, que no podrás encontrar en otro lugar. Ponte tu mejor traje de senderista (o el bañador, ¿por qué no?, ya que hoy... ¡¡nos vamos a descubrir esta tierra de volcanes!!

Indice

En este artículo de la guía de Islas Canarias (13 posts) podrás leer lo siguiente:

• 1 Descubre (y descifra) Timanfaya
• 2 Recorre (y disfruta) las mejores playas de Lanzarote
• 3 Haz una ruta de senderismo
• 4 Pasea por Arrecife, la capital de Lanzarote
• 5 Recorre el interior (y corazón) de Lanzarote
• 6 Degusta la gastronomía canaria (y los vinos)
• 7 Escápate a la Isla de La Graciosa
• 8 Asómbrate en las Salinas de Janubio, una experiencia diferente
• 9 Descubre el Jardín de Cactus, el colofón de Manrique
• 10 Visita un pueblo marinero
• 11 "Respira" un atardecer

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1 Descubre (y descifra) Timanfaya

Podría estar en Marte... pero no, estamos en Islas Canarias. El Parque Nacional de Timanfaya es un entorno natural de carácter principalmente geológico, surgido por las erupciones volcánicas que tuvieron lugar hace 200 y 300 años, entre 1730 y 1736, y en 1824. El resultado fue un total de 52 kilómetros cuadrados de paisaje que apenas se ha alterado desde entonces. A lo largo del parque, y especialmente en el Islote de Hilario, se encuentran las llamadas anomalías geotérmicas, cuya consecuencia es la creación de géiseres. Las aguas se calientan a tal temperatura, que el volumen y la presión aumentan, y sale "disparada" entre las grietas de la roca.

Dentro del Timanfaya existen muchos puntos de visita imprescindibles que te transportan, como mínimo, a la Luna. Destacamos Los Hervideros, unos imponentes acantilados que alcanzan su mayor esplendor cuando la marea está baja, momento en el que el Atlántico hierve y golpea con bravura.

2 Recorre (y disfruta) las mejores playas de Lanzarote

Los colores blanco, dorado y negro, acompañados de un agua cristalina del turquesa más brillante, protagonizan los arenales de esta isla. En ella podremos encontrar desde las playas más turísticas que, a pesar de esta condición, siguen sin perder su encanto, hasta lugares vírgenes que demuestran que la naturaleza es maravillosa.

Entre todas las playas de Lanzarote, destacamos...

1 Playas de Punta del Papagayo. Una zona de playas vírgenes de ambientación lunar, pero con un carácter totalmente paradisíaco que se mantiene intacto gracias a la labor de conservación que se realiza. Se localizan al sur de la isla, y para acceder, hay que pagar una pequeña cantidad, que se dedica al mantenimiento del entorno. Playa Mujeres, Playa del Pozo, Playa Papagayo... Si buscáis playas donde la naturaleza brille en su estado más puro, éste es vuestro lugar.

2 Playa Blanca. De un lugar virgen, pasamos a una de las zonas más concurridas de la isla, localizada en el ayuntamiento de Yaiza. En esta zona, encontramos un lugar más festivo, donde los bares y hoteles llenan de ambiente el lugar, sin que la belleza de Playa Dorada o Playa Flamingo deje de lucirse con esplendor. Desde la zona de Playa Blanca, también se puede coger un barco que lleva a Fuerteventura en media hora, así que... 2x1!

3 Caletón Blanco. Dicen que es blanca y limpia como pocas... aunque bonita, también. Esta preciosa playa merecía una mención exclusiva, ya que en ella la lava dejó su rastro en forma de rocas negras, que contrastan con un océano verde y su arena blanca.

4 Playa de Famara. Seis kilómetros de arena donde hay "hueco" para familias que disfrutan de un día de playa, surfistas que esperan la ola perfecta, caminantes que la recorren de un lado a otro respirando el aire del Atlántico... ¿Y si la marea está baja? Te robará el corazón. ¿Y si además está atardeciendo? No querrás irte de allí nunca.

5 Charco de los Clicos. una singular laguna de color verde cuyo color se debe al azufre y a un alga que habita en ella. Os recomendamos que le hagáis una visita por su peculiaridad.

3 Haz una ruta de senderismo

En un entorno de naturaleza absoluta, uno de los mejores planes es, sin ninguna duda, una ruta de senderismo. Es la mejor forma de conocer la parte más salvaje y virgen de Lanzarote. Por cierto... ¡no te asustes! Independientemente del nivel de tu estado físico, encontrarás alguna ruta que se adapte a tu situación.

Los Ajaches es una de las rutas más famosas de la isla, pasa por Degollada pico redondo y Degollada del portugués, construcciones agrícolas de piedra y por la zona de Torreta, donde se hallan restos arqueológicos que se atribuyen a los aborígenes. La ruta de la Caldera Blanca sale de la Iglesia de la Virgen de los Dolores, construída donde la lava se detuvo, finalizando con unas vistas maravillosas de Timanfaya. Tremesana desde Yaiza, Litoral desde El Golfo, de Yé al Volcán de la Corona... Son decenas las opciones que tenéis para recorrer a pie la isla, y en función de donde esté vuestro "campamento base", encontraréis alguna que os animará a coger los tenis y la mochila, y echaros a andar.

4 Pasea por Arrecife, la capital de Lanzarote

Arrecife es el centro administrativo y comercial de Lanzarote, y su nombre no engaña, ya que está lleno de arrecifes que tiñen sus aguas de un color tremendamente especial. Visitar la capital significa desconectar un poco de los momentos de naturaleza pero no tanto de la tranquilidad y evasión de una ciudad que vive de cara al mar y que dispone de amplios jardines, paseos y espacios verdes.

Más ambiente, más establecimientos, más gente,.. pero no por ello con menos encanto, sino que con uno diferente. El Castillo de San Gabriel, el Puente de las Bolas, el Charco de San Ginés, el Ayuntamiento.. son algunos de los lugares que no te puedes perder si visitas la capital.

5 Recorre el interior (y corazón) de Lanzarote

Otra de las consecuencias de la actividad volcánica que define la morfología de la isla son las grutas que han creado a su alrededor un tipo de turismo muy peculiar, despertando el interés de muchos de los visitantes. La isla está llena de cavidades subterráneas por lo que las actividades de espeleología resultan muy atractivas. El túnel volcánico es un orificio formado por la actividad volcánica y con sus 7'5 kilómetros de extensión, se posiciona como el más largo del mundo.

El Túnel de la Atlántida es la parte submarina, que cuenta con 1'5 kilómetros de longitud. Por otro lado, la Cueva de los Verdes es una cavidad donde los locales se protegían de ataques corsarios y su nombre se debe a que la titularidad de las tierras en las que se encuentra estaba en manos de la familia Verdes. Por último, los Jameos del Agua es un espacio natural formado por un túnel volcánico con cavernas convertido en centro cultural. A pesar de que estas son las Cuevas más visitadas, existen muchas otras bajo los suelos de Lanzarote... ¿Te animas a descubrirlas?

6 Degusta la gastronomía canaria (y los vinos)

Cuando pensamos en las Islas Canarias, a muchos (y sobre todo, a los buenos comedores) se os vendrá a la mente su plato más emblemático, conocido en todo el mundo: las papas arrugadas con mojo, un plato que podrás degustar en cualquier establecimiento que visites. Los ingredientes base del mojo (salsa) son aceite, vinagre, ajo, comino y sal. Sin embargo, existen múltiples variantes siendo el mojo picón la más reconocida.

Otro de los rasgos distintivos de la gastronomía canaria es el gofi, un ingrediente que protagoniza muchas de las elaboraciones más típicas y que consiste en una harina de maíz tostada artesanalmente. Por supuesto, no podemos dejar de mencionar todos los productos que provienen del mar. Pescado, marisco... podrás disfrutar de productos frescos que te sabrán a gloria así que, si vives en el interior, ¡aprovecha al máximo la oportunidad!

Hablamos de comer y comer, pero... tanta comida tendremos que acompañarla con un buen vino, ¿no? En la localidad de La Geria los viñedos situados en este entorno volcánico componen un paisaje único. Si os gusta el vino, os recomendamos que hagáis una ruta de bodegas donde la uva de categoría Malvasía Volcánica será la protagonista.

7 Escápate a la Isla de La Graciosa

A 1 kilómetro de Lanzarote y con 700 habitantes, La Graciosa se convierte en la isla más grande que forma parte del Achipiélago de Chinijo. Se puede plantear en una excursión organizada o por libre, cogiendo el ferry en el puerto de Órzola, el único punto que conecta Lanzarote con La Graciosa.

En esta isla no hay carreteras, no hay masificaciones, tampoco grandes alojamientos... Pero lo que sí hay, y que invade todo el territorio, es naturaleza.

Por tanto, es una visita perfecta para todos los que no necesitan más que una pequeña mochila y uno calzado cómodo para ser felices, y disfrutar las pistas de tierra, las caminatas por senderos rodeados de arbustos y un baño en las playas más tranquilas.

8 Asómbrate en las Salinas de Janubio, una experiencia diferente

La naturaleza ha creado en Lanzarote un entorno paisajístico único, pero la actividad del ser humano también ha contribuido a convertir en memorable cada estampa de Lanzarote. La Salinas del Janubio son fascinantes construcciones dedicadas a la recolecta de sal marina. Cuadrículas de colores tierra que varían según la fuerza con la que el sol las ilumina en cada momento. A nivel visual, un espectáculo que merece mucho la pena, sobre todo si nunca has visto una salina. Si además de la parte estética, te interesa a nivel cultural, también existe la opción de hacer una visita guiada disponible en español, inglés y alemán.

9 Descubre el Jardín de Cactus, el colofón de Manrique

Lo hemos comentado pero merece mención aparte. La obra con la que culminó Manrique su actividad en Lanzarote fue un espacio dedicado al culto de cactáceas de todo el mundo. Un jardín botánico de lo más peculiar. En esta intervención, César Manrique hizo confluir de forma magistral arte y naturaleza, convirtiendo su obra en un lugar de parada imprescindible para todo visitante de la isla. Se localiza en una antigua cantera de la que se extraían cenizas para los cultivos, y está presidido por un molino de viento que en el pasado se empleaba para moler maíz.

El tiempo que requiere esta actividad es de aproximadamente una hora, pero os prometemos que merece la pena (y los que llevan la cámara como una extensión del brazo, lo disfrutarán mucho mucho.

10 Visita un pueblo marinero

Todo lo que está relacionado con Lanzarote, está vinculado también con el mar, y donde hay mar, hay algún precioso pueblo pesquero donde las pequeñas barcas de colores esperan en su costa para salir a navegar. En el caso de Lanzarote, os recomendamos que viajéis hasta El Golfo, un pequeño pueblo con encanto de casas blancas, rodeado del paisaje árido y volcánico que caracteriza a la isla. Allí se encuentra el Lago Verde, del que os hemos hablado en el punto 2. No queremos olvidarnos de la localidad de Arrieta, también de tradición pesquera. En este pueblo se encuentra la playa de la Garita, muy famosa entre los turistas, y donde además se pueden adquirir artículos de cestería artesanal.

11 "Respira" un atardecer

¿No creéis que el atardecer es el momento más mágico del día? Respira. Si, ¡RESPIRA! Estamos seguros de que, si estáis pensando en viajar a Lanzarote es porque buscáis evasión, tranquilidad y naturaleza... y lo encontraréis todo. Por eso, después de un día de caminata por sus senderos y playas, os recomendamos que disfrutéis del atardecer. Algunos de los lugares donde podéis hacerlo son Playa Montaña Bermeja, Playa Famara, Mirador del Río, las Salinas de Janubio... Aprovechad este momento del día para relajaros y, los más románticos, podéis llevar algo de comer o beber, y disfrutar de un momento bonito con vuestra familia, amigos, pareja... o con vosotros mismos. ¿No os parece un plan tentador?

Y hasta aquí llegamos con 11 experiencias inolvidables en Lanzarote para gozar del entorno natural que ofrece esta isla. Un paisaje de película, que aúna una parte árida y ruda fruto del paso de la lava, con parajes tropicales acogedores que disfrutar en lugares como Playa Papagayo. ¿Alguna vez has estado en Lanzarote? ¿Cuál de las 11 que te hemos contado es tu experiencia favorita?

Paula e Isaac, desde Lanzarote