¿Os imagináis esa sensación de nervios y emoción al despegar hacia un destino tan exótico y desconocido como Mauritania? Ahí estaba yo, con la mirada fija en la ventanilla mientras las Islas Canarias se empequeñecían bajo mis pies y el inmenso azul del Atlántico me daba paso hacia el misterioso Sáhara. El vuelo a Mauritania con Binter es también mi primer encuentro con esta aerolínea así que os daré mi opinión y experiencia REAL que, os adelanto, ha sido una sorpresa.
Otra cosa ha sido el tema del visado a la llegada o esas sensaciones iniciales que marcan el comienzo de una gran aventura.
- Ruta del día: España - Nuakchot
- Planificación y reservas con antelación
- Cómo llegar a Mauritania desde España
- La historia de cómo nace un viaje a Mauritania
- Larga escala en Gran Canaria para leer historia de Mauritania
- Vuelo con Binter a Mauritania, opinión personal
- Datos del vuelo
- Opinión personal
- Llegada, aduana, evisa y primeras impresiones de Mauritania
- Cómo llegar a Nouakchott desde el aeropuerto
- Instalación y descanso: Primeras impresiones del Hotel Nouakchott
Ruta del día: España - Nuakchot
Planificación y reservas con antelación
LUGARES VISITADOS
🏨 RESERVAS ONLINE
En este viaje, por logística y optimización de tiempo, me voy con Leti Lagarda y el grupo de la extraordinaria agencia de Joan Torres, especializada en destinos insólitos y poco convencionales. OJO que llena los grupos con meses (a veces muchos) de antelación.
A mayores hicimos estas 🎟️ Reservas con antelación:
- Vuelo con Binter Canarias (reservado 3 meses antes a través de este comparador con opción flexible
- eVisa de Mauritania en al web oficial como te contamos en "Cómo tramitar la eVisa de Mauritania PASO A PASO"
La ruta del día ha sido similar a ésta (Clic Google Maps)...
¿Cuáles son las opciones que tenemos para viajar a Mauritania desde España?
Cómo llegar a Mauritania desde España
Llegar a Mauritania desde España no es precisamente sencillo, pero existen varias opciones que hemos investigado a fondo:
- Vuelo directo con Binter: Conecta Las Palmas de Gran Canaria con Nouakchott, siendo la opción más directa desde territorio español. Opera varios días a la semana y conecta con muchas ciudades como Madrid, A Coruña, Vigo, Zaragoza, Almería, San Sebastián, Santander, Asturias, Valencia, Valladolid, Granada, Murcia, Menorca, etc...
- Air France vía París: Conecta varias ciudades españolas con Nuakchot (o Nouakchott) haciendo escala en París.
- Royal Air Maroc vía Casablanca: Una opción popular que pasa por Marruecos.
- Turkish Airlines vía Estambul: Más largo pero a veces con mejores precios. Quizás es un poco locura...
- Tunis Air vía Túnez: Otra alternativa para conectar con Mauritania que a veces puede compensar.
Yo elegí Binter por la simplicidad de hacer una sola escala desde Galicia vía Gran Canaria, eliminando complicaciones de conexiones y potenciales problemas aunque voy con equipaje de mano para evitar pérdidas. No obstante, elegí la opción de Vigo porque tenía mayor escala y no me la jugaba con el poco intervalo que tenía el de A Coruña, al menos para la ida.
La historia de cómo nace un viaje a Mauritania
Aeropuerto de Vigo, 10 de la mañana. Existen enlaces con Gran Canaria también desde A Coruña (y por supuesto otros puntos de España) pero en este caso esta era la conexión perfecta para evitar incertidumbres, así que he bajado con mi propio coche y lo he dejado en el parking del que ya tenía reserva.
¿Y cómo he acabado aquí? ¿Y por qué este destino? La historia es algo más larga de lo que podría contar pero se unen dos ingredientes: un Tren de Hierro y la necesidad de oxígeno que me dan este tipo de viajes que tantas veces he hecho pero llevaba demasiado meses sin sentir
Así nace un viaje a Mauritania
Si tuviera que marcar un momento del nacimiento de este viaje, ese es hace ¡15 años!, leyendo la primera publicación de un blog llamado Historias de Nuestro Planeta. Ya sentía gran admiración por Antonio Aguilar, uno de esos viajeros que han alterado el ADN de los sueños del niño que llevo dentro con el tiempo (y no eran pocos), pero aquel día descubrí un Tren de Hierro que atravesaba el Sáhara y al que podías subirte a unos de sus vagones cargados de mineral y vivir una de las experiencias más auténticas y maravillosas, de cielos estrellados, de tormentas de arena, de un gigante de 3 kilómetro de longitud...
El otro ingrediente empezó, como nacen a veces las mejores ideas, una tarde cualquiera navegando por internet. Buscaba destinos que encajaran en un tiempo y un presupuesto pero, sobre todo, que pudiera oxigenar mi cabeza en esta etapa de mi vida. Y ahí apareció una lista de espera de Against The Compass EXPEDITIONS cuyo creador, Joan Torres, conozco sobradamente por sus inicios como blogger. Creo que tardé 3 minutos en decidirlo. ¡Era el destino!
"¿Te imaginas ahí subido?", me dije, medio en broma, medio sintiendo ya un cosquilleo. Poco sabía que esa chispa se convertiría en realidad unas semanas más tarde, cuando ya estaban comprados los billetes y a punto de despegar mi primer trayecto desde Vigo a Gran Canaria con mi nueva mochila. En este viaje estreno una Peak Design Travel Backpack 45l a la que ya le tenía ganas por su organización pensada 100% para viaje y que entra perfectamente como equipaje de mano, sin necesidad de facturar.
Por otro lado, la estabilidad del país en los últimos años me dio la tranquilidad necesaria para planificarlo. Me imaginaba ya explorando oasis escondidos, recorriendo antiguas rutas caravaneras y maravillándome con la arquitectura única de Chinguetti y Ouadane, ciudades declaradas Patrimonio de la Humanidad. Era la promesa de un viaje de contrastes. Mauritania conserva esa autenticidad casi intacta, un tesoro en el mundo actual y uno de los rincones menos visitados de África. ¡Allá vamos!
💡 CONSEJO PRÁCTICO: La mejor época para visitar Mauritania es entre noviembre y marzo, con temperaturas más suaves. Yo viajé en abril, justo al límite antes del calor sofocante. ¡Evitad los meses de verano a toda costa! El termómetro supera fácil los 45ºC.
Larga escala en Gran Canaria para leer historia de Mauritania
¡Primera sorpresa! ¿Una aerolínea con suficiente espacio para las piernas, que te da comida gourmet incluida en el precio y hasta te tratan bien? ¡No me creo que esto siga existiendo en España! Ya sabéis mi buena relación con Iberia...
Con la logística encarrilada, me toca una larga escala en Gran Canaria para devorar información sobre la fascinante historia de Mauritania. ¡Os lo recomiendo mucho! Descubrí cómo este enorme territorio desértico ha sido un cruce de caminos vital entre el África negra y el mundo árabe-bereber y me quedé maravillado al saber que las antiguas ciudades de Chinguetti, Ouadane, Tichitt y Walata fueron centros neurálgicos de las rutas comerciales transaharianas desde el siglo XI. ¡Imaginar las caravanas cruzando el desierto! Y Chinguetti, además, es considerada la séptima ciudad santa del Islam. Sus bibliotecas, junto con las de otras ciudades, custodian miles de manuscritos antiguos, un imán para estudiosos de todo el mundo. ¡Qué ganas de verlo en persona!
Entre lectura, donde llegué hasta la algo más compleja historia moderna con la colonización francesa (1903-1960), la independencia, las tensiones con vecinos por el Sáhara Occidental... y una sociedad que vive esa interesante transición entre las tradiciones nómadas y la vida urbana., una cena en el aeropuerto, casi me dieron las 22'00, hora de embarcar a mi siguiente vuelo.
💡 CONSEJO PRÁCTICO: Ojo con la eVISA porque no existe la posibilidad de volar si no te la han aprobado previamente y te será exigida para embarcar.
Vuelo con Binter a Mauritania, opinión personal
Datos del vuelo
Si bien ya había volado en el Vigo - Gran Canaria, os voy a dar mi opinión sincera global tras utilizar Binter Canarias, incluyendo la ruta Gran Canaria - Nouakchott que afronté posteriormente, que dura aproximadamente 2 horas y 30 minutos.
Opinión personal
No os voy a engañar, mi elección de Binter fue una decisión práctica. No había volado en mi vida con ellos ni tenía referencias, así que lo decisivo fue la conexión directa desde Las Palmas a Nouakchott. ¡Un lujo para un destino como Mauritania! Evitar escalas simplifica mucho y desde Galicia el resto de opciones no tenían sentido geográfico (¿para que voy a ir a París para volver a bajar?)
Además, siendo una aerolínea canaria, me daba cierta tranquilidad su familiaridad con los vuelos en esta zona del Atlántico. Las opiniones generales eran positivas sobre su puntualidad y amabilidad, justo lo que buscaba para empezar bien y así fue en ambos trayectos (ACTUALIZACIÓN: Y en la vuelta). La facturación en el mostrador de Binter fue rápida y sin colas, el personal muy eficiente. ¡Tarjeta de embarque en mano y a la puerta sin estrés! Además, el embarque empezó puntual, algo que valoro enormemente.
Ver Gran Canaria hacerse pequeña y el Atlántico abrirse bajo nosotros... esa sensación es impagable. Sentí esa mezcla de nerviosismo y excitación que anuncia una nueva aventura pero, a lo que vamos, mi experiencia general con Binter en esta ruta fue sorprendentemente positiva. Aunque a veces usan ATR 72, nos tocó un Embraer E195-E2, más cómodo para este trayecto sobre océano y desierto.
Ya a bordo, me llamó la atención el espaciado entre asientos, mejor que en muchos vuelos europeos de corta distancia. La tripulación, extremadamente amable, se manejaba con soltura en español, francés e inglés para atender a los pocos pero variados pasajeros. El avión era un modelo con asientos de cuero y espacio correcto para las piernas. El ambiente a bordo era tranquilo, con muchos pasajeros mauritanos volviendo a casa o gente viajando por trabajo. Se notaba que es una ruta funcional que conecta las islas con la capital mauritana.
A diferencia de muchas aerolíneas hoy en día, Binter ofreció un pequeño tentempié y bebidas incluidas. Un detalle simple (sándwich, dulce, bebida) pero que se agradece, sobre todo saliendo a media mañana. En el de Vigo a Gran Canaria me habían dado un bocadillo de jamón Gourmet y aquí el detalle fue poderme tomar una Dorada Especial, la última cerveza que tomaría en muchos días (Mauritania 0 alcohol)
Llegada, aduana, evisa y primeras impresiones de Mauritania
La planificación anticipada fue mi mejor aliada. Conseguir el eVisa unas semanas de antelación (como os cuento en en "Cómo tramitar la eVisa de Mauritania PASO A PASO") me ahorró posibles líos de última hora. De hecho, no es que sea aconsejable.. es ¡obligatorio! Y llevarla impresa más o te dejarán al final de la cola cuando pasen todos. Sino que le pregunten a mi amigo Ehedi. Ah, ¿qué todavía no os he hablado de Ehedi, Antonio, Brendan y Florentine? Forman parte de mi grupo y también viajan un día antes de que empiece el viaje como yo, pero habrá tiempo para las presentaciones. Empiezan la 12 pruebas de Asterix...
Tras aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Nouakchott-Oumtounsy (NKC), inaugurado en 2016 y relativamente nuevo y moderno, empezaron las colas. Una para pasar por una ventanilla para enseñar la eVisa y que te la sellen y pagar lo 55€ exactos de la misma (ojo si llevas más porque es posible que no tengan para devolverte). Ojo, vuelta para atrás, que te hacen cubrir otro "papelote"
Ahora si, trámite de la eVisa pasado, vamos hacia la aduana. Ah, que no, que a Florentine le dicen que no puede ser estudiante, que tiene que poner otra profesión. Llamada y vuelta para atrás a todos, donde sigue Ehedi sin eVisa impresa y otro esperando un cambio que nunca le llegará. Teléfono para arriba, otra cola, ah que no.. venga de vuelta. Tras mucho lío ¡POR FIN! logramos pasar el control de pasaportes y acceder a la sala de maletas donde hay otro control de equipajes para salir. ¡Madre mía! 40 minutos..
Todo en general ha sido a un ritmo "sahariano". ¡Sin prisas! Me dio tiempo a observar, a cambiar el chip y empezar a adaptarme al tempo local. Fuera, ya estaba nuestro guía local, esperando con una sonrisa y un cartelito con el nombre de Against The Compass. El primer contacto con el calor seco fue inmediato, intenso. Y los colores: todo ocres y amarillentos, tan distinto al verde que había dejado atrás. ¡La aventura empezaba de verdad!
También el hecho de tener los servicios de tierra de un tour completo, me da la tranquilidad de tener traslados, alojamiento y guía organizados desde el minuto uno en este caso para un país que carece de un transporte público y una logística decente.
Cómo llegar a Nouakchott desde el aeropuerto
El aeropuerto está a unos 25 km del centro de Nouakchott (30-40 minutos, según tráfico). Las opciones son:
- Taxi oficial: Recomendables por seguridad. Precio: 15-20€ (¡negociad antes!).
- Taxi compartido: Más barato (5-7€/persona), pero más incómodo y lento.
- Traslado privado: Lo que yo usé, incluido en el tour. La comodidad de que te esperen con tu nombre no tiene precio, sobre todo al llegar a un país nuevo.
Mi guía me esperaba sonriente. ¡El mejor recibimiento! Mi base confortable para empezar sería el Hotel Nouakchott.
💡 CONSEJO PRÁCTICO: Si llegáis de noche, imprescindible tener organizado el traslado previamente. El aeropuerto puede ser confuso y negociar con taxistas de noche por primera vez no es lo ideal.
Instalación y descanso: Primeras impresiones del Hotel Nouakchott
El trayecto del aeropuerto al hotel fue mi primer contacto real con Nouakchott. La capital me impactó con su mezcla peculiar: avenidas amplias pero polvorientas, edificios modernos junto a casas bajas, tráfico caótico y... ¡dunas de arena formándose en las esquinas! El desierto intentando reconquistar la ciudad, literalmente. Pero eso, lo veré mañana seguramente mejor con luz... El Hotel Nouakchott es considerado uno de los mejores establecimientos de la ciudad, con aspecto moderno y, aunque no es lujoso, ofrece un ambiente limpio y confortable.
Realmente elegí este alojamiento porque es el que recibe también al grupo mañana, por pura comodidad, aunque Florentine, Ehedi y Antonio irán a otro cercano. Brendan se queda conmigo. Mi habitación era amplia, limpia y con aire acondicionado (¡vital!). La decoración, funcional. La WiFi funcionaba razonablemente, ¡suficiente para dar señales de vida! (aunque yo ya tenía mis eSIM funcionando *en este viaje he comprado 2 diferentes, os hablo mañana*)
Y hasta aquí este primer día de larga jornada de vuelo a Mauritania con Binter. En la cama del hotel, me invadió esa mezcla de incredulidad y emoción. "¿Estoy realmente en Mauritania?". Sí, estaba allí. Los próximos días prometían una aventura de las que se graban en la memoria. El tren del desierto, los oasis, las ciudades antiguas... todo me esperaba. Pero esa es otra historia que os contaré pronto.
Isaac, desde Nouakchott (Mauritania)
